Franco ratifica “ilegalidad e ilegitimidad” de sanciones de Mercosur y Unasur
"El Gobierno deplora las vejatorias sanciones aplicadas a Paraguay por el Mercosur y la Unasur por medio de decisiones dictadas en abierta violación a los tratados vigentes, sin observar el debido proceso y sin concederle oportunidad para la defensa", aseveró Franco.
El nuevo presidente paraguayo, Federico Franco, quien sustituyó a Fernando Lugo, ratificó que las suspensiones aplicadas a su país por el Mercosur y la Unasur son “ilegales e ilegítimas” en el informe de gestión ante el Congreso.
“El Gobierno deplora las vejatorias sanciones aplicadas a Paraguay por el Mercosur y la Unasur por medio de decisiones dictadas en abierta violación a los tratados vigentes, sin observar el debido proceso y sin concederle oportunidad para la defensa”, aseveró Franco.
“Por tanto, estas decisiones son consideradas por Paraguay como ilegales e ilegítimas“, remarcó el gobernante en alusión a las sanciones aplicadas por ambos bloques regionales en una cumbre conjunta en Mendoza (Argentina), celebrada el viernes último.
El jefe de Estado, quien sustituyó en el cargo a Lugo el 22 de junio pasado, pocas horas después de que este último fuera apartado del cargo tras ser sometido por el Legislativo a un juicio político, se expresó en esos términos durante la presentación del informe anual de gestión del Poder Ejecutivo ante Parlamento.
Franco, que con esas declaraciones ratificó la condena expresada en sendos comunicados por la Cancillería contra la resoluciones de los dos bloques, reiteró, además, que “el Gobierno promoverá las acciones que correspondan al amparo del derecho internacional”.
Ambas instancias suramericanas, donde fue denunciado el presunto quiebre del “orden democrático” en Paraguay y criticada la celeridad con la que fue promovida la destitución de Lugo, indicaron que las sanciones se mantendrán hasta las elecciones generales en Paraguay, previstas el 21 de abril de 2013.
El gobernante sostuvo que “en el país reina la paz y la tranquilidad” y que “los derechos individuales y las garantías constitucionales están plenamente vigentes”.
Franco, vicepresidente con Lugo desde 2008, acudió al Congreso en medio de un amplio dispositivo de seguridad para adelantar las directrices de su Gobierno para lo que resta de mandato, que concluye el 15 de agosto del año próximo.
El mandatario prevé recibir el lunes a una misión especial de la Organización de Estados Americanos (OEA), encabezada por su secretario general, José Miguel Insulza, para observar la situación por la que atraviesa el país ante la crisis política originada con la destitución de Lugo.
La misión de la OEA llegará a Asunción esta noche y, según reiteró el nuevo canciller, José Fernández, tendrá todas las libertades y garantías para entrevistarse tanto con las autoridades como con Lugo, sus allegados y la prensa.
Los mecanismos aplicados en el enjuiciamiento son duramente cuestionados por el exobispo, quien afirma que fue víctima de un “golpe de Estado parlamentario”.