Fumar marihuana en la adolescencia provocaría déficits mentales duraderos
Según un estudio, el consumo permanente antes de los 18 años causa daños prolongados en la inteligencia, la atención y la memoria. Los resultados de la investigación han sido publicados en 'PNAS'.
Según un estudio de cohorte, a largo plazo, que incluyó a más de 1.000 neozelandeses, los individuos que iniciaron el consumo de cannabis en la adolescencia, y continuaron este consumo durante varios años, mostraron una disminución media del CI de 8 puntos, al comparar su CI a los 13 años, y a los 38. Dejar de fumar posteriormente no pareció revertir la pérdida, afirma la investigadora principal Madeline Meier, investigadora en la Universidad de Duke, en Estados Unidos.
La variable clave fue la edad de inicio de consumo de marihuana, y el desarrollo del cerebro, señala Meier. Los sujetos del estudio que no consumieron marihuana hasta que fueron adultos no mostraron reducciones mentales. Antes de los 18 años, sin embargo, el cerebro todavía está en desarrollo, y puede ser más vulnerable a los daños de las drogas. “La marihuana no es inofensiva, especialmente para los adolescentes”, apunta Meier.
El estudio siguió a un grupo de 1.037 niños nacidos entre 1972 y 1973 en Dunedin (Nueva Zelanda), desde el nacimiento hasta los 38 años, y fue dirigido por Terrie Moffitt y Avshalom Caspi, psicólogos de Duke y del Instituto de Psiquiatría del Kings College de Londres.
Alrededor del 5% del grupo de estudio eran dependientes de la marihuana, o la utilizaban más de una vez a la semana, antes de los 18 años. A los 38 años, todos los participantes del estudio realizaron una serie de pruebas psicológicas para evaluar su memoria, velocidad de procesamiento, razonamiento y procesamiento visual. Las personas que consumían marihuana regularmente en la adolescencia obtuvieron resultados significativamente peores. Los amigos y familiares, entrevistados de forma rutinaria como parte del estudio, eran propensos a informar que los consumidores regulares de cannabis tenían problemas de atención y de memoria.
La disminución en el coeficiente intelectual entre los consumidores regulares de cannabis del estudio, no se pudo explicar por el alcohol u otras drogas, o por tener menos educación, señala Moffitt.
Aunque ocho puntos de CI no parecen mucho en una escala donde 100 es la media, pasar de un CI de 100 a un CI de 92 representa pasar de estar en el percentil 50, al 29. Meier explica que un elevado coeficiente intelectual se correlaciona con una mayor educación e ingresos, una mejor salud y una vida más larga, por lo que alguien que pierde 8 puntos de CI como adolescente puede estar en desventaja, en comparación con sus compañeros de la misma edad, en el futuro.