8 puntos a tener en cuenta antes de actualizar a Windows 8
Luego de una larga espera y muchos adelantos sobre sus novedades, Microsoft finalmente lanzó al mercado de manera oficial su Sistema Operativo Windows 8. El sitio Bitelia da razones para tener en cuenta y decidir si nos cambiamos o no a Windows 8.
- Precio: Actualizar a Windows 8 resulta considerablemente más económico de lo que en su momento costó actualizar a Windows Vista o Windows 7. Para poner un ejemplo concreto: Windows 7 Home Edition tenía un precio de $199 dólares, mientras que la versión Professional llegaba a los $299 dólares. Con las promociones que está ofreciendo Microsoft, es posible actualizar a Windows 8 desde $14,99 dólares. Incluso viendo más allá de las promociones, el preció máximo que tendrá una licencia de Windows 8 será de $69.99 dólares, y esto es solo en el caso de que quieras tener el disco de instalación con su caja, ya que también será posible actualizar en línea por un precio bastante más bajo.
- Tienda de aplicaciones: Una de las cosas que más ha llamada mi atención de la nueva versión del Sistema Operativo de Microsoft es la Windows Store. Gracias a la tienda, será mucho más fácil encontrar y descargar aplicaciones para disfrutar en nuestros ordenadores. De momento la Windows Store cuenta con unas 5 mil aplicaciones, pero con toda seguridad este número va a crecer en los próximos meses y, personalmente, no tengo dudas de que veremos muchas cosas interesantes por allí a corto plazo.
- Sincronización en la nube: Muchas de las aplicaciones y de los servicios que usamos a diario aprovechan la nube para mantener todos nuestros dispositivos sincronizados. Este es un aspecto que, sin duda, ha cambiado positivamente la forma en que trabajamos, nos divertimos y nos comunicamos. Realmente resulta sencillo retomar lo que estamos haciendo en un dispositivo cuando nos desconectamos y pasamos a otro. Si utilizamos varios ordenadores con Windows 8 -correctamente configurados- podemos aprovechar estos beneficios, ahora en nuestro Sistema Operativo de todos los días.
- Aplicaciones nativas para diferentes tipos de archivo: Windows 8 incorpora opciones para visualizar múltiples formatos de archivo que anteriormente requerían instalar una nueva aplicación. Por ejemplo, la nueva versión de Windows trae su propio visor de archivos PDF, gracias a esto ya no es necesario instalar el Adobe Reader (por citar un ejemplo) si todo lo que quieres es simplemente leer un documento en este formato. También resulta interesante el manejo que Windows 8 da a las imágenes ISO y VHD, ya que es posible montarlas directamente desde el Sistema Operativo y dejarlas disponibles como unidades de disco individuales sin mayores problemas.
- Historial de archivos: Con Windows 8 es posible mantener un registro histórico de los archivos que utilizamos a diario, con esta opción es posible recuperar documentos a un estado anterior. Esta opción no es del todo nueva, de hecho es la misma función de copias de seguridad de Windows, pero con más y mejores características además de ser mucho más amigable para el usuario.
Razones para no actualizar a Windows 8
- Nueva interfaz: Aunque muchos la cataloguen de “novedosa” y “revolucionaria”, la nueva interfaz de Windows 8 (hasta hace poco conocida con el nombre clave “Metro”) resulta, de cierto modo, un problema. Primero, porque Microsoft, con su pantalla de inicio obliga a los usuarios a cambiar la manera en que interactuan con el ordenador. Por otro lado, la nueva interfaz está más orientada hacia las pantallas táctiles, pero ¿cuántos de los que usamos Windows regularmente tenemos monitores de este tipo?.
- Cuentas Microsoft -casi- obligatorias: Para poder aprovechar todas las funciones -sobre todo las nuevas- del Sistema Operativo es necesario contar con una cuenta Microsoft (hasta hace poco Windows Live). Aunque es posible usar Windows 8 sin una de estas cuentas, sí que es necesario tener una para poder acceder a la tienda de aplicaciones y al servicio de sincronización en la nube. El hecho de que la competencia también lo haga de esta manera no significa que esté bien.
- Actualización desde Windows XP: Desde el punto de vista personal no hay ningún problema o dificultad a las hora de actualizar los equipos con Windows XP a Windows 8, de hecho resulta muy sencillo, pero desde el punto de vista empresarial sí que puede ser un problema. Una empresa que tenga todos sus ordenadores corriendo en XP y decidan actualizar a Windows 8, tendrán que invertir recursos adicionales en la capacitación de sus empleados en el uso de la nueva versión del Sistema Operativo. Como ya lo mencioné, con la nueva interfaz las cosas cambian un poco y es necesario poner a los usuarios al día. Puede que las licencias a precios tan bajos ayuden a equilibrar las cosas desde el punto de vista económico, pero habrá que esperar para ver el “efecto 8” en las empresas.