“Mitomanías argentinas”, el libro que desmiente que el país vecino sea un enclave europeo
El antropólogo Alejandro Grimson dice que la argentinidad se sustenta en base de mitos falsos.. Sostiene que uno de ellos es la idea de que el mestizaje fue preferentemente entre italianos, españoles y polacos.
El concepto de ‘crisol de razas’ arraigó en Brasil para describir una sociedad producto del mestizaje entre indígenas, negros y europeos. En Argentina, la noción del crisol étnico refiere a otro mestizaje: italianos, españoles y polacos que llegaron como producto de la inmigración masiva que se dio, sobre todo, a comienzos del siglo XX. Sin embargo, ese mito de la Argentina como enclave europeo en el extremo sur de la América Latina oculta a la mitad del país, e ignora ese vasto territorio que hay más allá de la Capital Federal de Buenos Aires.
Esa es una de las ideas principales que subyacen en el libro ‘Mitomanías argentinas. Cómo hablamos de nosotros mismos’, del antropólogo Alejandro Grimson (ed. Siglo XXI). En esta obra, el antropólogo se propone indagar en la construcción de una idea de la argentinidad que se sustenta a base de mitos, muchos de ellos falsos, para “reflexionar sobreafirmaciones que dañan nuestra cultura democrática y nuestro debate político”, como señala en una entrevista publicada por el diario‘Página 12’.
Argentinidad al palo
“Argentinidad al palo” es una expresión muy porteña que sintetiza algunos tópicos mil veces repetidos en las calles, los bares y los taxis de Buenos Aires. Una identidad argentina que, pretendidamente, se forma por los descendientes de aquellos inmigrantes europeos. Pero esto deja fuera a una buena parte de la población negra, indígena y mestiza que durante décadas ha sido invisibilizada. La antropóloga Rita Segato lo llamó “la aplanadora cultural argentina”, que se sustentó sobre un poso de miedo a la diversidad.