Luces y sombras: 12 claves que marcan la vida y pontificado de Benedicto XVI

1.- Una vida agitada:

Joseph Aloisius Ratzinger nació el 16 de abril de 1927 en Marktl am Inn, un pueblecito de Baviera, era hijo de un gendarme del Estado Libre de Baviera y de una cocinera. Descubrió la vocación siguendo los pasos de su hermano mayor Georg. Sin embargo, con la llegada de la II Guerra mundial debió dejar el seminario y con sólo 16 años se vio obligado a servir en la artillería antiaérea, asistiendo en primera fila a la sistemática destrucción de Múnich en bombardeos.

Tras exponerse al fusilamiento desertó y regresó a su pueblo. Luego fue arrestado por soldados noreteamericanos e internado en un campo de concentración con miles de soldados alemanes, consigna ABC.

Joseph Ratzinger, ha afirmado en más de una ocasión que el día más importante de su vida fue el de su ordenación sacerdotal y el momento crucial de cada día es el de la misa, que celebra temprano.

Su carácter se formó durante los veinte años que pasó como profesor en las universidades públicas de Bonn, Münster, Tubinga y Regensburg. En aquella época fue también asesor del Concilio Vaticano II (1962-1965), lo que le permitió trabajar en Roma. Su primer libro, “Introducción al Cristianismo”, se convirtió en best seller.

Desde las aulas pasó en 1977 a ser nombrado por Pablo VI arzobispo de Münich hasta que en 1981 Juan Pablo II lo llamó a Roma para dirigir la Congregación para la Doctrina de la Fe y se convirtió poco a poco en su principal colaborador. Durante casi un cuarto de siglo, el prefecto fue a la vez, investigador, teólogo y escritor. Desde su rol de decano del Colegio Cardenalicio siguió de cerca  la enfermedad de Juan Pablo II, las exequias y la preparación del Cónclave de abril del 2005. 

2.- De Joseph a Benedicto, sus primeras palabras:

Tras ser electo como el pontífice número 265 en la historia, Ratzinger mutó a Benedicto XVI; entonces pronunció sus primeras palabras desde la Basílica Vaticana con un tono marcado por el agradecimiento: “Queridos hermanos y hermanas: después del gran papa Juan Pablo II, los señores cardenales me han elegido a mí, un simple y humilde trabajador de la viña del Señor. Me consuela el hecho de que el Señor sabe trabajar y actuar incluso con instrumentos insuficientes, y sobre todo me encomiendo a vuestras oraciones. En la alegría del Señor resucitado, confiando en su ayuda continua, sigamos adelante. El Señor nos ayudará y María, su santísima Madre, estará a nuestro lado. ¡Gracias!”.

3.- Las encíclicas:

El Santo Padre publicó su primera encíclica en 2006 bajó el título de “Deus Caritast Est”. El texto comienza con las palabras “Dios es amor, quien está en el amor habita en Dios y Dios habita en él”. El papa sorprendió con este texto después de que fueran varias las personalidades que pronosticaron que esta primera encíclica sería una lección severa sobre la doctrina cristiana. “Salvados en la esperanza” (Spe salvi) fue el título de su segunda encíclica; un texto en el que Benedicto XVI suscita un ansia de eternidad. “No es un continuo sucederse de días del calendario sino el momento gratísimo de sumergirse en el cocénao del amor infinito”. Con tercera encíclica, “Caridad en la verdad” (Caritas en Veritatis), se introduce la coyuntura económica al indicar que “la fuerza más podersosa al servicio del desarrollo es el humanismo cristiano”.

4.- Cambios en la elección del representante de Pedro:

Cuando nadie esperaba cambios en las normas del cónclave, de las que se habla sólo cuando se acerca la elección de un Papa, Benedicto XVI convirtió en el año 2007 en absoluto el requisito de mayoría cualificada, de dos tercios de los cardenales electores, derogando el paso a mayoría absoluta (la mitad más uno) a partir del trigésimo tercer escrutinio. Con las nuevas normas, sólo pueden ser «papables» los candidatos de muy amplio consenso.

5.- Su mirada del nacimiento de Jesús:

“La infancia de Jesús”, es el título del el último libro de Benedicto XVI. El Santo Padre afirma en este texto que las narraciones de Mateo y Lucas son “historia real y sucedida, interpretada y comprendida sobre la base de la Palabra de Dios”. Además apunta que los Evangelios no citan al buey ni a la mula en la gruta de Belén. Del mismo modo, Benedicto XVI confirmo, como experto, que el nacimiento de Jesús tuvo lugar a caballo entre los años 7 y 6 antes de Cristo.

6.- El Papa y los problemas de la gente:

El Santo Padre siempre se declaró preocupado por los problemas que afectan a las personas comunes y corrientes, cuestión que, por cierto, incluye lo referente a la coyuntura económica. Sin ir más lejos, la semana recién pasada, el Papa presentó un diagnóstico sobre la situación de la juventud y pidió a los adultos que no dejen en la estacada a la siguiente generación, amenazada por el desempleo, la fragmentación cultural y la inestabilidad emotiva.

7.- El drama de los abusos sexuales:

Uno de los acontecimientos más importantes que de los ocho años de pontificado de Joseph Ratzinger se dio a principios de 2012 cuando el Vaticano reconoció que 4.000 casos de abusos sexuales a menores por parte de clérigos llegaron a la Congregación para la Doctrina de la Fe en los últimos diez años.

El Santo Padre hizo entonces un llamado a una profunda renovación de la Iglesia, recordando que “la ayuda de curación a las víctimas debe ser la preocupación principal de la comunidad cristiana, y debe ir de la mano de una profunda renovación de la Iglesia a todos los niveles”. Del mismo modo, el Vaticano lanzó una página web para aprender a prevenir los abusos sexuales a menores. El programa incluye la detección precoz de síntomas de abuso, la pedagogía básica de prevención para los propios niños, las medidas de supervisión, los aspectos legales, las perspectivas teológicas y la atención al ambiente familiar.

A principios de febrero en tanto, la Congregación para Doctrina de la fe informó que en los últimos tres años llegaron al Vaticano 1.800 denuncias de casos de abusos sexuales a menores por parte de clérigos y la mayoría de los mismos ocurrieron entre 1965 y 1985.

8.- Papa Twittero:

El 12 de diciembre pasado y para sorpresa de todos, el pontífice se convertía en el primer líder de la Iglesia con una cuenta en la red de microblogging. Su primer tuit, en la cuenta de @Pontifex, transmitió el siguiente mensaje: “Unitati christifidelium integre studentes quid iubet Dominus? Orare semper, iustitiam factitare, amare probitatem, humiles Secum ambulare”. El mismo mensaje era lanzado poco antes en 9 idiomas incluyendo el castellano: “¿Qué nos pide el Señor para contribuir a la unidad de los cristianos? Orar constantemente, practicar la justicia, amar la bondad y seguirlo”.

En su último twitteo publicado este domingo Benedicto XVI pedía confianza en el “poder de la misericordia de Dios”.

“Confiemos siempre en el poder de la misericordia de Dios. Todos somos pecadores, pero su gracia transforma y renueva nuestra vida”, dice el tuit en la cuenta del papa en castellano, @pontifex_es.

El Santo Padre llegó a tener más de un millón y medio de seguidores en la red y publicó 34 mensajes en los mencionados 9 idiomas. 

9.- El pontífice que irrumpió en el comic:

En su afán por acercarse a la juventud, el Papa  subrayó la necesidad de utilizar el lenguaje de éstos, “sin miedo a la modernidad y  la evolución cultural”. Por ello se transformó en el ‘héroe’ de un cómic manga, bautizado como “Habemus Papam!” y que se distribuyó durante la Jornada Mundial de la Juventud, realizadas en España.

El cómic, del que se distribuirán 300.000 ejemplares en inglés y español durante la visita del pontífice a Madrid, se centra sobre todo en la trayectoria de Benedicto XVI a partir del momento en el que se convierte en Papa.

10.- Momentos polémicos:

Sorpresa provocó dentro y fuera de la iglesia al optar por recuperar la imagen del infierno que Juan Pablo II había enterrado en 1999 y descartar la existencia del limbo; además ordenó la supresión del buey, la mula y los pastores en los nacimientos, alegando una interpretación escupulosa de la Biblia, tal como publica 20 minutos.

Otro de los momentos complejos de debió enfrentar se dio tras la indignación que provocó en los países islámicos uno de sus discursos, por lo que debió disculparse. El discurso arremetía contra la Jihad, la Guerra Santa musulmana, y la conversión mediante el uso de la violencia.

11.- El caso Vatileaks o la traición del mayordomo:

El rol de mayordomo del Papa adquirió notoriedad también durante el pasado 2012, gracias a las irregularidades cometidas por Paolo Gabriele, quien robó material reservado del Vaticano desde el año 2006.  Sin embrago, fue a fines de 2011 cuando comenzó a hablarse del llamado Caso Vatileaks y de Il Corvo (el Cuervo) -nombre dado a la persona que robó y filtró los documentos que acabaron publicados en el libro Sua Santita, de Gianluigi Nuzzi.

El registro de la casa de Gabriele, el pasado 23 de mayo, llevó a descubrir más de un millar de documentos entre fotocopias y originales: diez veces más de los publicados en un libro que había salido a la calle cuatro días antes. Entre ellos hay muchos documentos personales, referentes a la vida estrictamente privada del Papa y de su familia. Al final de la escapada, la autodestrucción de “Paoletto” fue casi total.

Incluso acusó de torturas de la Gendarmería Vaticana,algo que contrasta con las revelaciones que indican que le trataron con guante blanco, más bien con favoritismo, y que tanto él como sus abogados lo agradecieron en numerosas ocasiones. Gabriele, de 46 años, fue condenado el pasado 6 de octubre a 18 meses de cárcel, que cumple desde el 25 de octubre en una celda del Vaticano.

12.- El papa que canonizó a 34 santos:

El 23 de octubre de 2005, seis meses después de ser proclamado Papa, Benedicto XVI celebró la primera ceremonia de canonización, en la que elevó a la gloria de los altares al fundador de Hogar de Cristo, padre Alberto Hurtado Cruchuga,junto a otros cuatro beatos. Con esto el pontífice retomó la costumbre de los papas de oficiar sólo ceremonias de canonización, dejando las beatificaciones al Prefecto de la Congregación de la Causa de los Santos.

Durante su pontificado, Benedicto XVI proclamó a 600 beatos (incluyendo a Juan Pablo II) y a un total de 34 santos, de ellos once son italianos, cinco polacos, cuatro latinoamericanos, tres franceses, tres españoles, un maltés, un holandés, un belga, un suizo, un portugués, un australiano, un canadiense y uno de la India, informa El Imparcial.