5 motivos por los que MEO no participará de las primarias de la oposición

“En el partido ya lo proclamamos y estamos embarcados en el tren a la primera vuelta” dice con el micrófono apagado un dirigente del Partido Progresista. “Nosotros creemos que Marco debiera ser el candidato de toda la oposición, pero esta difícil”, señala la misma fuente.

Las últimas semanas han sido especialmente movidas en el progresismo. Todo partió el viernes 8 de febrero, cuando la directiva del partido de Marco Enríquez Ominami se reunió con sus pares del Partido Socialista para explorar un posible acuerdo que agrupara a toda la oposición, de cara a las elecciones parlamentarias y presidenciales de noviembre. “Si hay orden y programa, estamos disponibles para primarias en todos los cargos”, declaró en esa ocasión la presidenta del PRO, Patricia Morales.

“Es otro juego de Marquito”, señala con desdén un dirigente concertacionista, utilizando el mismo diminutivo para referirse a MEO que acuñó Camilo Escalona en la pasada elección presidencial.

El miércoles 13 de febrero el PRO invitó a la directiva DC a reunirse para conversar sobre las primarias, pero la falange postergó el encuentro para marzo. “Conversaremos sin imposiciones”, indicó en esa oportunidad el timonel, subrogante, de la DC, Fuad Chahín.

Ahora, el PRO decidió convocar a todos los partidos de la oposición a reunirse con ellos el próximo 15 de marzo.  “Creemos necesario que exista un reordenamiento político al interior de la oposición”, dicen desde la colectividad de MEO. Pero desde la Concertación interpretan la convocatoria como una maniobra para sentirse en libertad de acción e ir a primarias igual si es que no hay acuerdo en torno a un programa. 

“Yo tengo la mejor disposición, pero yo entiendo esta conversación con tres patitas, lo programático, las primarias y el pacto parlamentario. Yo entiendo que las cosas avanzan simultáneamente  Lo que yo conversé con ellos fue: primarias para todos los cargos, acuerdo parlamentario y acuerdo programático básico”, argumenta el presidente del socialismo, Osvaldo Andrade, recalcando que no existirá acuerdo si Marco no participa de la primaria opositora.

El propio Andrade confirma su asistencia al encuentro convocado por el PRO para el 15 de marzo “Yo voy a ir, no tengo problemas”. La Democracia Cristiana sostendrá este viernes 1 de marzo una reunión de su directiva para definir que harán al respecto.

Si al interior del PRO ya existe la convicción de llegar a primera vuelta, ¿a dónde conducen las negociaciones entre la Concertación y MEO para participar en primarias?. A continuación, te dejamos los 5 motivos por los que Marco Enríquez Ominami no llegará a las primarias de la oposición.

1- Desacuerdos programáticos

Los progresistas han dicho que lo primordial para ellos es avanzar en un programa común de la oposición, y han lanzado las ideas prioritarias que esperarían estampar en ese documento: nueva constitución surgida de una asamblea constituyente, educación pública gratuita y mayores derechos para los ciudadanos, como la despenalización del aborto y el matrimonio homosexual.

El vice presidente de la Democracia Cristiana, Jorge Burgos, pone sus reparos “Esa es una condición compleja para el diálogo, ¿por qué vamos a estar de acuerdo con la Asamblea Constituyente, o en la despenalización a todo evento del aborto?”. El dirigente de la falange insiste en que si el PRO quiere diálogo, éste debe ser sin condiciones previas.

La respuesta desde el progresismo es dura “Yo me pregunto quien, al interior de la oposición, podría estar en desacuerdo con generar un programa que permita  tener una educación pública, gratuita y de calidad. Entonces, con todo respeto, ¿Qué hace la Democracia Cristiana al interior de la oposición, si no está de acuerdo con éste tipo de medidas fundamentales?“, dispara Patricia Morales.

Desde el Partido Comunista hacen un llamado a “transar” algo de la propuesta “Cuando uno quiere construir un acuerdo programático, en la diversidad, tiene que tener conciencia que es una diversidad. No todos los que van a concurrir son del PRO, ni del PC, ni de la DC. Entonces hay que ver cual es el común, y yo creo que el común es más que el mínimo” asevera el diputado Lautaro Carmona.

En el PRO han asegurado que sin acuerdo programático se hace imposible cualquier tipo de pacto electoral.

2- Sentimiento “anti Concertación”

La relación del PRO con la Concertación nunca ha sido fácil. En la elección presidencial pasada las hostilidades entre el entonces candidato Eduardo Frei y Marco Enríquez Ominami, fueron evidentes. Incluso, muchos desde el conglomerado del arcoiris culparon a MEO de la derrota frente a la Alianza.

Pasado ese proceso, los seguidores de “Marquito” se lanzaron a construir una estructura partidaria por todo Chile, dando vida a lo que hoy es el PRO, que en regiones recogió buena parte del desencanto con la Concertación, agrupando a ex militantes de los Partido Socialista y Comunista.

Al interior del progresismo aseguran que las bases regionales rechazan cualquier tipo de acuerdo con la Concertación, lo que sería un escollo importante si MEO, o su padre adoptivo, Carlos Ominami, quien tiene un ascendente importante sobre el candidato, deciden un acercamiento en serio con el resto de la oposición.

3- Rechazo DC

Los síntomas del rechazo que produce el progresismo al interior de la Democracia Cristiana se manifiestan cada tanto.  En julio pasado el secretario general del partido, Víctor Maldonado, acusó: “Se dice progresista, pero favorece a la Derecha”, por la decisión del PRO de presentar candidatos a los municipios por fuera del pacto de la Concertación con el PC.

Las heridas de la pasada elección presidencial siguen abiertas, en su momento el ex vice presidente de la falange, Renán Fuentealba, señaló que  “uno de los objetivos políticos de Marco Enríquez Ominami con su aventura presidencial fue destruir a la Concertación y su exitosa contribución al desarrollo de Chile en los últimos 20 años, por esa razón consideramos que éste no debe participar en nuestro cónclave”, en rechazo a que se incluyera al líder progresista en el encuentro que organizó la Concertación cuando salió del gobierno.

Las relaciones entre el PRO y la DC no han sido amables por ninguno de los dos lados “Los senadores DC fueron el choapino para que Pinochet se instalara en el Senado”, acusó hace un tiempo MEO al diario El Mostrador.

4- Factor Michelle

“Cualquier conversación hay que tenerla cuando Michelle Bachelet sea candidata, y tengamos a todos los otros candidatos; Gómez, Orrego, en fin, y podamos concluir algo en conjunto. Hoy día es simplemente el PRO molestando un poquito”, aseguró a la Radio Universidad de Chile el diputado de la DC, Pablo Lorenzini. Las palabras del congresista son un reflejo del convencimiento que existe en la Concertación del triunfo de Michelle Bachelet en las primarias de junio y en la presidencial de noviembre.

Ese clima triunfalista es conocido al interior del PRO donde saben que hoy su candidato es el segundo mejor posicionado en la oposición, y el análisis que existe es que si MEO se enfrenta a Bachelet en las primarias, podría sepultar su carrera política, debido a la derrota que le propinaría la ex Presidenta.

Por el momento, en el progresismo continúan apostando a que Marco se presente como “la alternativa”, tal y como lo hizo el 2009.

5- Cronograma establecido

Un día después de la pretendida reunión con todos los partidos de la Concertación más el PC, el PRO realizará su convención programática para definir los principales lineamientos de la candidatura presidencial de MEO.

En un documento que fue repartido a sus estructuras regionales se asegura “(este documento) Será entregado al comando presidencial, para que, junto a los aportes programáticos de nuestra red de líderes y profesionales progresistas (…) se construya el programa de gobierno que Marco llevará a La Moneda en noviembre próximo”.

Los militantes de todas las regiones del PRO discutirán respecto a 17 propuestas que envió al directiva nacional del partido, y que podrían ser incluidas en el programa de MEO. Entre ellas: nueva constitución, educación gratuita y nuevo código laboral.

El documento termina con una referencia al padre biológico del candidato, el lider del MIR Miguel Enríquez “Adelante Marco, adelante con todas las fuerzas de la historia”, se lee en la última página del escrito.

Al consultar sobre este documento, en el PRO son claros “Marco va a llegar a la primera vuelta”.