El día en que Facebook no quiso practicantes chilenos
El lunes 23 de agosto el Ministerio de Economía publicó el siguiente llamado: “Facebook, una de las redes sociales más grande del planeta, ha decidido buscar en nuestro país a un ingeniero que desee realizar su práctica profesional en esta compañía”. Dos meses después la compañía fundada por Mark Zuckerberg declaró desierto el proceso.
El lunes 23 de agosto el Ministerio de Economía publicó el siguiente llamado: “Facebook, una de las redes sociales más grande del planeta, ha decidido buscar en nuestro país a un ingeniero que desee realizar su práctica profesional en esta compañía”. Dos meses después la compañía fundada por Mark Zuckerberg declaró desierto el proceso.
Los futuros ingenieros se perdieron de una pasantía por 12 semanas en la oficina central de la multinacional ubicada en Palo Alto, California. Sin duda, el sueño de cualquier estudiante de informática.
Hubo 50 interesados de las más destacadas universidades nacionales. Cada uno de ellos llenó el formulario titulado “Facebook Application for Chilean Students” y que Economía puso a su disposición. Luego de una entrevista personal, elaboraron una lista de seis candidatos para presentar a la conocida red social.
Entre quienes llegaron a instancias finales y se quedaron en el camino está Ignacio Parada, alumno de la Universidad Católica. El futuro ingeniero recuerda que les comunicaron la mala noticia en un e-mail donde les agradecieron por participar y explicaron que “había tipos en otros países mejor que nosotros”.
Para Alfredo Barriga, secretario ejecutivo de Estrategia Digital del Ministerio de Economía, el problema fue muy concreto: la falta de un inglés fluido. “No basta con saber hablar, hay que manejarlo tan bien como el castellano”, sintetizó el funcionario de Gobierno.
Ignacio tiene una explicación diferente, “faltó preparación” aseguró. Relata que el proceso fue muy difícil, “hice tres entrevistas durante dos semanas, el nivel era altísimo y fue aumentando cada vez más”. Las pruebas se basaban en estructura de datos y algoritmos, “cosa en la que nosotros no estamos particularmente entrenados” explicó.
De todas formas este joven de 25 años ya se imaginaba en Silicon Valley. “En la primera prueba me fue mal, pero en la segunda y en la tercera me fue súper bien, yo creí que estaba seguro adentro”, cuenta decepcionado. Y cómo no estarlo si, más allá de trabajar en una de las punto com más importantes del mundo, recibiría casi seis mil dólares mensuales.
Que ninguno de los estudiantes cumpliera los estándares de Facebook es “preocupante”, al menos para el director del Departamento de Ciencias de la Computación de la Universidad de Chile, Nelson Baloian. “Pensé que estaríamos mejor, creo que hay potencial y me sorprende el resultado”, confesó el académico. Para Baleain los estudiantes tienen muy buenas capacidades técnicas, pero que el problema se encuentra en la falta de “habilidades blandas”, las que describe como las destrezas que les permitan “moverse mejor en los negocios, vender una idea y venderse ellos mismos”.
Samuel Varas, director de la carrera de Informática de la Universidad de Adolfo Ibañez, también tiene críticas para los futuros profesionales, “les falta hambre” dice. Según el docente, en Chile les cuesta poco encontrar trabajo a este tipo de profesionales, por lo que no serían necesarios grandes esfuerzos.
El Ministerio de Economía mediante un comunicado informó a El Dínamo que durante el proceso se evaluaron las “motivaciones, habilidades técnicas y calce cultural con la empresa”, pero que tras las entrevistas Facebook “decidió no continuar el proceso. Sin embargo, quedó abierta la opción para las próximas selecciones”.