Preocupante: En junio el costo de la energía llegó a su promedio más alto desde la crisis del gas
La media mensual llegó el pasado día 25 a US$245,5 por MWh, cifra que no se veía desde 2007 y que se explica por la sequía y la salida inesperada de varias centrales. Sin embargo, el Ministerio de Energía descarta -de momento- el racionamiento.
Considerando los primeros 25 días de junio, el promedio mensual del costo marginal llegó a US$245 por MWh, cifra que representa un incremento de 20% respecto del mes anterior, cuando el costo marginal anotó un promedio de US209,4 por MWh, y de 75% respecto de los US$143 del mismo mes de 2012.
Este inédito resultado sólo se compara con las alzas detonadas tras los cortes en los envíos de gas desde Argentina, entre 2006 y 2007, periodo en el que los precios se dispararon a niveles tres o cuatro veces mayores que los que se tenía hasta antes de la crisis, tal como consigna El Pulso.
Y es que las cifras de las últimas semanas, sobresalen como las más altas para un mes de junio precisamente desde 2007, cuando el costo marginal en la barra Quillota 220 kV promedió US$251 por MWh. Por si esto fuera poco, se espera que al terminar el mes el costo sea aún mayor, pues durante los últimos días éste ha seguido subiendo. De hecho, el último día de análisis, el nivel máximo alcanzó los US$284,8 por MWh, 13% por sobre el promedio mensual.
El factor agua
La explicación se vincula con el bajo nivel de lluvias en el país, sumado a la salida por mantención de varias unidades que son clave para el Sistema Interconectado Central (SIC). Este último factor ha neteado el efecto que se esperaba tuviera el aumento del parque de generación a carbón, que el año pasado creció en 1.000 MW con la entrada comercial de las centrales Santa María (Colbún), Campiche (AES Gener) y Bocamina II (Endesa).
La situación se complica aún más debido a la salida de algunas centrales por fallas y paralizaciones programadas, cuestión que ha obligado a aumentar la generación con diésel, la más costosa e ineficiente del parque de generación.
En este contexto, el ministro de Energía, Jorge Bunster, apuntó que maneja una proyección de año seco para este año, lo que se esperaba no fuera así, dado que, según los pronósticos climatológicos, el fenómeno de La Niña, que explica la sequía en el país, había quedado atrás dando paso a una fase neutra, por ende, más húmeda que los años anteriores.
Así la participación hidroeléctrica se encuentra por debajo del 30% y su aporte al SIC es más que duplicado por la termoelectricidad, que entre carbón y GNL alcanzan picos de 70% los días de mayor demanda por energía.
En todo caso Bunster agregó que pese a que el Gobierno analiza permanentemente la opción de activar un decreto de racionamiento, por ahora esto no se hará.
A los clientes, en tanto, no les queda más que esperar que siga lloviendo, cuestión que permitiría frenar las restricciones de los embalses y aumentar una generación barata. Y que no fallen más centrales, ya que sólo en mayo el sistema se vio afectado por la salida simultánea de tres unidades: Nueva Renca (mantención), Nehuenco 2 y Santa María.
“La escasez hidráulica ha resultado en prácticamente el agotamiento de todas las reservas de energía en los embalses del SIC”, apunta el ultimo informe de la c0nsultora Systep.