Así va a ser la elección presidencial para los chilenos en el exterior
El próximo sábado Voto Ciudadano y la Fundación Democracia y Desarrollo lanzarán la campaña de difusión de la votación electrónica presidencial que realizarán entre el 11 y el 16 de noviembre, una "votación simbólica" que permitirá que los chilenos en el extranjero pueda elegir a su candidato.
Entre el 11 y el 16 de noviembre próximo los chilenos que viven en el extranjero van a poder votar por su candidato presidencial. Aunque se trata de una “votación simbólica”, será la primera en la que podrán participar personas que residan en distintos países, de forma anónima y cuyos resultados oficiales se conocerán el domingo 17. El mismo día en que todos los chilenos que viven en Chile estén de verdad votando por quién será el próximo candidato que llegará a La Moneda.
“Hay que darle un espacio a los chilenos que están afuera”, dice Rossana Dresdner, directora ejecutiva de Voto Ciudadano, una ONG que promueve la participación ciudadana a través de una plataforma virtual, y que junto con la Fundación Democracia y Desarrollo, a través de su comunidad El Quinto Poder, organiza esta inicitiva.
Hasta la fecha, la organización ha realizado cinco consultas nacionales: Plebiscito Nacional por la Educación (octubre 2011), Consulta sobre la Ley de TV Digital (noviembre 2011), Consulta Nacional sobre Reconstrucción (febrero 2012), Plebiscito por la Salud (abril/mayo 2012) y Consulta Nacional sobre Patrimonio (mayo/junio 2012). Además se adjudicaron una licitación para realizar una consulta sobre el plan comunal de La Reina (septiembre 2013).
Pero esta será la primera en la que están invitando a participar a los chilenos que viven fuera del país, sin embargo, debido al despliegue que se requiere en términos de software sólo se realizará una elección presidencial, y no parlamentaria. Pese a ello, aseguran que es un aporte a un tema que califica como “muy potente.”
“Nosotros por definición no nos relacionamos con partidos políticos”, aclara Dresdner, pero considerando que este es un tema “potente” y que se está discutiendo fundamentalmente en el Congreso decidieron tomar contacto con parlamentarios: “Hemos tenido muchas conversaciones y hasta el momento a todos con los que hemos conversado les parece que, en términos simbólicos, esta votación es súper importante”.
Por eso, para el lanzamiento de la campaña de difusión, que realizarán este sábado, están invitando a todos los sectores, sin embargo, reconoce que es un tema que está dividido políticamente, pero es algo que ellos no pueden evitar. “Nos parece muy bien que no haya una opinión única”, asegura, y explica que el debate en torno al voto en el extranjero y a esta consulta es “un aporte al objetivo final que es que todos los chilenos tengan derecho a votar”.
Los temores en el extranjero
Para Rodrigo Olavarría, chileno residente en París y miembro del Comité Internacional Chile Somos Todos, esta iniciativa retoma lo que ya han venido realizando las organizaciones de chilenos en el extranjero en sus respectivos territorios, como las votaciones simbólicas que se realizaron en ciudades como París, Madrid o Sydney para las primarias del 30 de junio pasado bajo la campaña “Haz tu voto volar”.
Pero asegura que los riesgos que se corren con iniciativas como éstas es que haya una baja participación. “Si somos como 1 millón fuera de Chile, al menos se necesitan 200 mil participantes”, detalla, pero sostiene que si se trabaja juntos es posible llegar a esa cifra. Dresdner dice que son peleas que hay que dar: “Si uno realmente cree en la opinión ciudadana, como nosotros creemos, tiene que exponerse también a que uno de repente tiene la impresión que la gente mayoritariamente no tiene. Uno cree que a la gente le interesa algo que no les interesa”.
Olavarría agrega que otra preocupación es la participación de la Fundación Democracia y Desarrollo, creada por el ex presidente Ricardo Lagos, y que le participación de otras fundaciones y centros de estudios de todas las tendencias políticas habría generado “menos suspicacia”.
Al respecto, Dresdner explica que ellos trabajan con El Quinto Poder, una plataforma de la fundación, la que mostró su interés por participar y difundir esta consulta, así como lo ha hecho con otras que han realizado antes. “No hemos ido a hablar con Lagos ni nada. El Quinto Poder le da espacio a todos los que quieran opinar allí, y nosotros también”.
“Nosotros en Voto Ciudadano no trabajamos con partidos políticos, trabajamos con organizaciones sociales y no nos interesa su tendencia política, lo que los valida es que representen a un grupo ciudadanos”, añade.
Dresdner también sostiene que otra de las preocupaciones que tiene las organizaciones de chilenos en el extranjero es que si la votación sale muy mayoritariamente beneficiada Michelle Bachelet o alguno de los otros candidatos que no sea de derecha, esto va a desincentivar a los parlamentarios de ese sector a aprobar el voto en el exterior. Frente a esto, asegura que “les hemos dichos que esto es un derecho, que está en la Constitución y que no puede estar condicionando a los resultados de una votación”.
La tecnología del voto
Durante el lanzamiento de la campaña de difusión, Voto Ciudadano mostrará un demo de cómo se realizará la votación y cómo se verá el voto. El soporte tecnológico es entregado y respaldado por Inria Chile, una corporación que se dedica a la investigación y desarrollo de tecnologías de la información, y que está conformada por Inria Francia y nueve universidades chilenas, lideradas por la Universidad de Chile.
Dresdner califica como una “asociación virtuosa” el trabajo que han venido realizando ambos, ya que mientras su organización convoca las consultas que permiten aumentar la participación, la corporación puede ir testeando su plataforma e ir desarrollando su investigación sobre la votación electrónica.
“Esperamos que esta sea la votación más masiva”, dice Tomás Barros, director técnico de Inria Chile, quien asegura que si bien ya se han realizado votaciones electrónicas masivas, esta tecnología que incluso garantiza el anonimato del votante ha tenido varias pruebas y sólo una real, cuando fue utilizada para la consulta de la comuna La Reina, pero ahí sólo votaron en torno a 4.000 personas.
Explica que detrás de esta tecnología hay años de investigación que se ha realizado en el mundo, ya que lo que hicieron fue buscar en los paper científicos que hay sobre el tema y ver cuál podía ser utilizado y aplicado en un plazo de tiempo razonable. Eso fue lo que llevaron a un código y lo implementaron en un programa.
Sin embargo, para los votantes el proceso será bastante simple. Lo primero que ocurrirá es que una vez que ingresen a la plataforma de votación virtual se verificará que la IP provenga del extranjero y sóla esas podrán ver el voto. Tras lo cual la persona deberá elegir su opción, y una vez que haya votado se le preguntarán sus datos.
“Cada voto que nosotros recibimos se encripta. Si hiciéramos la analogía al papel es como si lo metieras en un sobre cerrado”, explica Barros, por eso una vez que está encriptada la información recién se piden los datos. “Cuando tú eliges tu opción se mete en un sobre, y después lo que estamos preguntando es de parte de quién viene”. Ésa asegura que es la garantía del anonimato: “aunque quisiéramos, no tenemos cómo saber por quién votó la persona”.
Los votantes deberán ingresar su rut, además del serial de su carnet o pasaporte, por lo que sólo se podrá votar una vez durante los seis días que durará el proceso, tras lo cual se conocerán los resultados.
Para saber quién ganó, explica Barros, lo que se hace es que a través de un algoritmo matemático se suman los votos sin necesidad de abrir los sobres, sino que se logra hacer una suma que queda dentro de otro sobre encriptado que es el que finalmente se abre. “Nunca se abre un voto individual”, sostiene.
El proceso estará resguardado por un Tricel conformado por un integrante Voto Ciudadano y de la Fundación Democracia y Desarrollo, José Migue Piquer -pionero en el desarrollo de internet en el país-, un académico de la Universidad de Chile y un representante de las organizaciones de chilenos en el extranjero. Cada uno de ellos tendrá una “llave” para abrir esta urna virtual: un archivo digital que permitirá desencriptar el resultado.
Para conocerlo se requiere la llaves de tres de ellos, ya que una persona sola no lo puede abrir. “Eso da más garantías”, detalla el experto, y cuenta que el proceso se hará en vivo en una conferencia de prensa.
Sobre la posibilidad de usar este tecnología en votaciones reales, Barros asegura que la idea es que sea más que en una “votación simbólica”. Asegura que esta tecnología sirve sí o sí si se utiliza como urna electrónica donde la gente va a votar, ya que identificarlos remotamente es algo más complicado.
Por eso, sostiene, que este tipo de votaciones electrónicas se podría usar tanto en Chile como en el extranjero, si se pone por ejemplo en un consulado. Así “en vez de urna con papeles habría un computador”.
EL PROYECTO QUE SE ESTÁ DISCUTIENDO
“Es un gran avance el que nos encontremos discutiendo el cómo lo vamos a hacer, cuando hace un par de años ni siquiera había acuerdo sobre el hecho de hacer efectivo nuestro derecho a voto”. Así comenta Olavarría el proyecto que se está discutiendo en el Senado para permitir el voto de los chilenos en el extranjero.
Impulsada por los senadores Isabel Allende, Soledad Alvear, Alberto Espina, Hernán Larraín y Patricio Walker, la iniciativa fue aprobada en general en septiembre pasado y a comienzo de este mes fue despachado por la comisión de Constitución tras rechazar todas las indicaciones que se habían presentado.
El proyecto contempla que los chilenos que viven fuera del país puedan votar para las presidenciales y plebiscitos, siempre y cuando así lo soliciten para cada uno de los procesos eleccionarios. Aunque las organizaciones celebraron el avance instaron a que también incluya las parlamentarias y que sólo sea necesario inscribirse una vez.
“Me parece ilógico que no podamos votar en las parlamentarias. Las decisiones que toman los legisladores también nos afectan. Lo ideal sería reconocer distritos en el exterior, que tengamos la posibilidad de contar con nuestros propios representantes en el parlamento”, dice Olavarría.