"Poco Hombre": Pedro Lemebel vuelve a las librerías con nueva publicación
El texto, en cuyos entresijos cabe vislumbrar una especie de autobiografía, está escrito con la mezcla de humor, de rabia y de lirismo que se ha convertido en sello de la obra entera de un autor único e ineludible.
En el marco de la 33° Feria Internacional del Libro de Santiago, el próximo sábado 2 de noviembre se presentará “Poco hombre”, el más reciente trabajo del escritor Pedro Lemebel.
En la ocasión estará presente Ignacio Echevarría, editor y crítico literario español, quien hizo la selección de las crónicas que componen este libro, además del prólogo.
Reuniendo piezas publicadas en el transcurso de más de dos décadas,”Poco hombre” propone un amplio recorrido por la obra de Pedro Lemebel como cronista. Las cinco secciones en que se organiza articulan una implacable panorámica de la sociedad y de la historia reciente de Chile, en cuyos entresijos cabe vislumbrar los trazos de una especie de autobiografía, también ella escrita con la mezcla de humor, de rabia y de lirismo que se ha convertido en sello de la obra entera de un autor verdaderamente único e ineludible.
La cita es a las 16 horas del sábado 2 de noviembre, en la Sala de las Artes de la Estación Mapocho.
Que dijo Roberto Bolaño sobre el trabajo de Lemebel:
“Travestido, militante, tercermundista, anarquista, mapuche de adopción, vilipendiado por un establishment que no soporta sus palabras certeras, memorioso hasta las lágrimas, no hay campo de batalla en donde Lemebel, fragilísimo, no haya combatido y perdido. Para mí Lemebel es uno de los mejores escritores de Chile y el mejor poeta de mi generación, aunque no escriba poesía. Lemebel es de los pocos que no buscan la respetabilidad (esa respetabilidad por la que los escritores chilenos pierden el culo) sino la libertad. Sus colegas, la horda de mediocres procedente de la derecha y de la izquierda, lo miran por encima del hombro y procuran sonreír. No es el primer homosexual, válgame Dios, del Parnaso chileno, lleno de locas en los armarios, pero es el primer travesti que sube al escenario, solo, iluminado por todos los focos, y que se pone a hablar ante un público literalmente estupefacto“.