Los "quiltros" de Antonio Becerro encuentran acogida en el Museo de Bellas Artes

A partir del próximo 7 de enero y hasta el 30 de marzo, los perros callejeros o “quiltros” embalsamados con que ha trabajado desde la pasada década del ’90 el artista plástico Antonio Becerro serán acogidos por el Museo de Bellas Artes, dándole así la legimitimidad del stablishment a una obra bizarra desde sus orígenes.

La exposición “Encontraron cielo”, que ha sido presentada en otros espacios más contraculturales, es una obra de grandes dimensiones que recoge el trabajo de Becerro con estos animales, recogidos tras su muerte y convertidos en una metáfora de la chilenidad.

De acuerdo a lo informado por el MNBA, la muestra consta de una intervención en la fachada del edificio, que se prolonga hacia el Hall Central, proponiendo un recorrido que finaliza con una instalación en el Ala Norte del primer piso.

“Su obra hace una inflexión en lo ideológico, en lo social, apropiándose de la imagen del quiltro, de los espacios abandonados, desde cuyos márgenes también hace una crítica a la mercantilización del arte. Así mismo la importancia del quiltro, síntoma de ese mestizaje del cual el artista alude de manera explícita, con el fin de representar ese origen inconsciente o motivación desconocida siempre presente en la obra”, señaló el director del Museo Nacional de Bellas Artes, Roberto Farriol.

“A través de la metáfora y humor negro, Becerro reflexiona y usa los medios de comunicación como extensión legítima de su obra, instaurando con ello un modelo original de artista borderline y su relación con la institucionalidad del arte en Chile”, reza el comunicado recogido por Bío Bío.

Anteriormente el montaje se instaló en la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Santiago de Chile, USACH (2012), el Museo de Arte Moderno de Chiloé (2013) y a los pies de la escultura El roto chileno, de Virginio Arias, en la Plaza Yungay (2013).