Hernán Larraín presenta crítico documento: "Hay ausencia de liderazgo y conducción en la UDI"
El Gobierno de Sebastián Piñera tampoco se salvó de los dardos, ya que para los parlamentarios "fueron muchas la situaciones que el Gobierno, a lo largo de todo el país, hizo o dejó de hacer gestiones que podían ser relevantes, evidenciando una falta de tacto y sensibilidad política que generó permanentes complicaciones en todas las elecciones".
Una dura crítica a la gestión realizada por la UDI en el último tiempo realizó un grupo de parlamentarios comandados por el senador Hernán Larraín en la antesala del Consejo Directivo que se llevará a cabo este fin de semana en Valparaíso, quienes dieron a conocer un documento en el cual acusan al gremialismo de dogmatismo y “falta de calle”.
El escrito, firmado además por los diputados Giovanni Calderón, Andrea Molina, Felipe Ward, Monica Zalaquett, Edmundo Eluchans y el senador Jaime Orpis, da cuenta de las razones por las cuales la Alianza sufrió un duro revés en las elecciones parlamentarias y presidenciales.
En primer lugar, disparan contra “la forma cómo se ha enfrentado ciertos temas que terminaron por posicionar a nuestra colectividad en una posición de derecha dura y altamente dogmática. Eso ha ocurrido, por ejemplo, cuando se han enfrentado temas económicos y tributarios, donde la UDI aparece defendiendo posiciones que ni los empresarios plantean, ajenas a la realidad de nuestros problemas”.
Además, acusan “autocomplacencia” respecto al modelo económico lo que hizo que la colectividad acrecentara “una aguda insensibilidad respecto de lo que pasaba en el entorno, que vivía un profundo cambio social originado precisamente por ese modelo”.
También apuntaron como causas de la derrota electoral a la “ausencia de liderazgo y conducción en el partido”, “procedimientos internos impropios”, así como un “alejamiento del mundo social”.
El Gobierno de Sebastián Piñera tampoco se salvó de los dardos, ya que para los parlamentarios “fueron muchas la situaciones que el Gobierno, a lo largo de todo el país, hizo o dejó de hacer gestiones que podían ser relevantes, evidenciando una falta de tacto y sensibilidad política que generó permanentes complicaciones en todas las elecciones: primero en las municipales y luego en las presidenciales y parlamentarias”.
“Hubo muy poca consideración con nuestras candidaturas, se intervino a favor de algunas en desmedro de otras, se cuestionaron actuaciones pasadas de nuestra candidata presidencial, se tomaron decisiones inoportunas como anunciar en plena campaña medidas duras en contra de sectores de la población, etc.”, precisan.
En vista de esta situación, postular que “la forma cómo corresponde llevar adelante este proceso debe reflejar un estilo político renovado. No más confrontaciones duras, no más descalificaciones personales, no más ironías injuriosas. Más argumentos, más propuestas concretas, más actitud proactiva. Más humildad, menos soberbia. Respeto a quienes surgen por sus medios, respeto a la meritocracia. Más terreno, menos oficina”.
