Sepa qué hicieron sus senadores por usted este año

Diciembre es época de ránkings, de recopilaciones y de recuerdos de lo mejor y lo peor del año. Y en El Dínamo nos preguntamos en cuál de esos extremos se encuentra el trabajo de los senadores. Por eso, analizamos qué hicieron los parlamentarios durante el periodo legislativo de marzo a diciembre, y seleccionamos a quienes presentaron más y menos proyectos de Ley, los más y menos prioritarios -según el criterio de los honorables- y en qué quedó la mayoría de ellos.

 

En lo que va del año, se despacharon 139 proyectos, 24 de ellos de manera íntegra. Y de ese total, los temas tratados fueron diversos: bonificaciones, reconstrucción, fiscalización ambiental y portabilidad numérica, por nombrar algunos. Respecto a los temas con más apoyo transversal, Carlos Bianchi, el único parlamentario independiente de la Cámara Alta, explica que “los de reformas laborales producen consenso absoluto”.

 

Y aunque menciona también los proyectos relativos a educación, salud y vivienda, hace énfasis en los bonos. Porque “nadie se va a negar a votar un bono que beneficie a la gente con menos recursos”. De un total de más de 500 proyectos ingresados este año a la sala, se aprobaron 34.

 

 

Repecto al trabajo individual de los parlamentarios, sobran contrastes. Hay senadores que presentaron casi 50 proyectos de Ley, y otros que no llegaron con ninguno. Repitiendo su conducta del año pasado. El RN Francisco Chahuán, por ejemplo, ingresó 34 propuestas a la sala, y Alejandro Navarro, del MAS, 45.

 

 

En el extremo contrario despuntan el DC Eduardo Frei Ruiz-Tagle y el UDI -y ex presidente de la Cámara- Jovino Novoa, ambos con cero proyectos de Ley presentados en los últimos 10 meses. Novoa, por segundo año consecutivo.

 

Pero más documentos no significa mejores parlamentarios. No necesariamente. El PS Fulvio Rossi, con 19 iniciativas presentadas en lo que va del año, sabe que el peso de los proyectos no está en la cantidad, sino en el debate -y el consenso- que generen en la Cámara.

 

“Pueden ingresar proyectos sin que estos importen. Disculpa la expresión, pero (pueden ser proyectos) estúpidos y eso no va a significar nada”, dice Rossi. Y de esos hay varios. Sin ánimos de juzgar los criterios de cada parlamentario, entre las propuestas de este año destacan varias por su escasa prioridad en comparación con temas de salud, educación vivienda y reconstrucción.

 

Entre ellas, existe la del primer domingo de Diciembre como el Día de la Dueña de casa, propuesto por Carlos Bianchi y el RN Antonio Horvath, entre otros; un proyecto basado en el “menoscabo moral como causal para el cambio de nombres y apellidos”, presentado por Chahuán, otro “relativo al uso de la bandera nacional”, ingresado por el UDI Pablo Longueira, y los de monumentos al ex ministro José Tohá y el misionero Allen Gardiner.

 

Respecto a algunos de esos proyectos, Bianchi explica que a veces se presentan para “hacer un guiño” a la ciudadanía. Según el parlamentario, él presentó la iniciativa de reconocer la profesión de ministro de culto religioso, “y el propio mundo evangélico me pidió que, además, se erigiera un monumento. Que se haga es poco probable, pero al menos se recoge”.

 

Y se presenta. Él, con 25 proyectos, es el tercero en el ránking de los con más ideas presentadas, y le sigue el PPD y ex ministro de la  Segegob Ricardo Lagos Weber, con 20. Entre los que menos iniciativa demuestran a la hora de ingresar propuestas después de Frei y Novoa, están el DC Mariano Ruiz-Esquide, el UDI Juan Antonio Coloma y el RN Carlos Kuschel, con tres proyectos cada uno; y los DC Andrés Zaldívar e Ignacio Walker y el UDI Víctor Pérez, con cuatro iniciativas por persona.

 

Respecto a la carencia de proyectos ingresados, Bianchi coincide con Rossi en que una alta cantidad no asegura la calidad del parlamentario. Pero tampoco exime a Novoa y Frei, por ejemplo: al comentarle que han presentado -sumando a ambos- cero proyectos este año, el senador independiente dijo que “existen ciertas personas que, por haber tenido cargos de mayor representación -como el ex Presidente Eduardo Frei-, o por llevar muchos años en política, se sienten con cierta autoridad para hacer menos que el resto”.

 

Sin embargo, una solución para hacer más efectiva la legislación de proyectos que llevan años pendientes en el Congreso, según él, sería la que comentó “medio en broma y medio en serio” en la Cámara: presentar un proyecto de Ley para que no se presenten más proyectos de Ley en 10 años”. Así, según Bianchi, “se legislaría todo lo que está pendiente”.