Nuevo reglamento del SEA da portazo a dos tercios de los proyectos presentados
A casi dos meses de su entrada en vigencia, de las 67 iniciativas recepcionadas, un total de 42 no han sido acogidas a tramitación. Otras 11 iniciativas han sido desistidas por parte de los titulares y seis permanecen a la espera de conocer si son o no acogidas.
La entrada en vigencia del nuevo reglamento del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) a fines de diciembre pasado, sumada a los cambios a los mecanismos de gestión y tramitación de proyectos de inversión, han golpeado a las empresas que apuestan por este tipo de iniciativas.
Según el listado de proyectos enviados a tramitación ambiental al SEA del 23 de diciembre a la fecha, de las 67 iniciativas recepcionadas, un total de 42 no han sido acogidas a tramitación. La cifra equivale al 63% del total, tal como informa El Pulso.
Otras 11 iniciativas han sido desistidas por parte de los titulares y seis permanecen a la espera de conocer si son o no acogidas por el SEA.
Así sólo ocho proyectos han sido acogidos a tramitación, lo que equivale al 12% del total de iniciativas remitidas al servicio público.
En cifras, los proyectos no acogidos suman US$868 millones, el 72% de los US$1.209 millones del total de iniciativas recepcionadas. Por su partes, los que siguen en calificación llegan a US$162 millones, el 13,4%.
Desde el Ejecutivo explican que la normativa ha establecido nuevas exigencias, lo que obliga a los titulares a efectuar cambios en sus declaraciones o estudios de impacto ambiental, trámite que no ha sido cumplido por la totalidad de las empresas que han remitido iniciativas al SEA.
En este contexto, una de las empresas más afectadas ha sido Enel Green Power, la filial de inversiones en energías renovables del grupo italiano Enel, y que ha presentado dos iniciativas que no fueron acogidas: los parques eólicos Los Buenos Aires y Mulchén (ambos en la región del Biobío, con una potencia instalada de 39,6 MW y 89,1 MW respectivamente).
A ojos del SEA se trata de proyectos que carecen de información clave para una correcta evaluación, por lo que el titular, en caso de que quiera retomar la iniciativa, deberá corregir estos puntos y modificar la información presentada.
Transición
Según el director (s) del Servicio de Evaluación Ambiental, Edesio Carrasco, el gobierno espera que esta situación se corrija, y agrega que se trata de un fenómeno puntual ocasionado por la transición entre un sistema y otro.
“Efectivamente, las exigencias contempladas en el nuevo reglamento han elevado los estándares para la presentación de declaraciones de impacto ambiental (DIA) y estudios de impacto ambiental (EIA). Por lo tanto, el hecho de que algunos proyectos o actividades no hayan sido admitidos a trámite, obedece a razones que, en general, se explican debido a la ausencia de información que se requiere para evaluar adecuadamente estas iniciativas”, dijo.
“Esperamos que esta situación no se extienda mayormente, pero entendemos que estamos en un período de ajuste y por tanto la situación debiese normalizarse prontamente. En ese sentido, las puertas del SEA están y han estado, siempre abiertas para aclarar dudas o consultas respecto al nuevo reglamento de operación del Servicio de Evaluación Ambiental”, añade.
La situación contrasta con lo ocurrido con los 106 proyectos ingresados el día 23 de diciembre pasado, último día antes de la entrada en vigencia del reglamento del SEA. De ese total, apenas 8 no fueron acogidos a tramitación, mientras que 91 (el 86% del total) ya están en calificación. En términos de montos, de los US$5.412 millones en proyectos sometidos al escrutinio de la autoridad ambiental US$4.909 millones (el 90,7% del total) fueron acogidos a tramitación, mientras que los no acogidos suman US$490 millones (9%).
“Hay que recordar que el nuevo reglamento eleva los estándares de la información que deben entregar los titulares y es mucho más exigente que el anterior, además de tener ciertos mecanismos que evitan que algunos proyectos que presentan deficiencias prolonguen su tramitación en el sistema (…) Probablemente las consultoras y los titulares de proyectos querían que sus iniciativas se evaluaran con el reglamento antiguo. Esto puede deberse a que era un cuerpo normativo que conocían y con el que se sentían más cómodos” explicó ese día Ricardo Irarrázabal, el director ejecutivo titular del Servicio de Evaluación Ambiental.
De cara al nuevo reglamento, la idea es que estas mayores exigencias es que una vez que las empresas se adapten al nuevo sistema, sea más fácil para los servicios públicos con competencia en los procesos de evaluación ambiental conocer y analizar los impactos de los proyectos, de manera de avanzar con mayor velocidad en el período de calificación.
Así lo señaló el SEA cuando presentó el ordenamiento. “El nuevo reglamento permite a las empresas definir con mayor claridad el nivel de impacto de sus iniciativas y saber por anticipado si hay un nivel de afectación a pueblos indígenas. El nuevo estatuto también permite al SEA volver a foja cero los proyectos, y poner término por anticipado a la tramitación a través de un recurso llamado IRE”.
Irarrázabal dijo que “ahora exigiremos mayor información sobre el proyecto desde un comienzo. Además, ahora existe una figura que es el término del procedimiento y la devolución de antecedentes si es que no hay información relevante y esencial”.