¿Te tinca? La FAO vuelve a recomendar el consumo de insectos
Tal como hace un año, la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación promovió, esta vez desde una coferencia en Holanda, el uso de insectos como alimento humano y forraje para garantizar la seguridad alimentaria
Justo hace un año, la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) removió las conciencias y los estómagos de buena parte de la sociedad occidental cuando el año pasado publicó un extenso y documentado informe titulado Los insectos comestibles: Perspectivas de futuro de la seguridad alimentaria y la alimentación.
A partir de este lunes el tema ha vuelta a estar -literalmente- sobre la mesa gracias a la celebración en el el lujoso hotel Reehorst de Ede, en el centro de Holanda, de la conferencia internacional Insectos para alimentar al mundo, organizada por la FAO y la Wageningen UR, centro de universidad e investigación vinculado a la universidad holandesa de Wageningen.
El objetivo general de la conferencia es promover el uso de insectos como alimento humano y como forraje para garantizar la seguridad alimentaria, consigna La Vanguardia.
El organismo estima que el mundo necesita para aumentar su producción de alimentos en un 70% para 2050 con el fin de atender a una población mundial de nueve mil millones. La producción de piensos está compitiendo cada vez más por los recursos (tierra, agua y fertilizantes) con la alimentación humana y la producción de combustible, la urbanización y la naturaleza.
El dossier informativo de preparación de la conferencia internacional detalla que el 70% de las tierras agrícolas del mundo ya sea directamente o indirectamente, está dedicada a la producción de carne. En este sentido, los responsables de la FAO se preguntan si, con una creciente población mundial y los consumidores cada vez más exigentes, ¿podemos todavía producir suficiente proteína animal en el futuro?
La respuesta de esta organización de Naciones Unidas puede parecer extraña en sociedades como la nuestra -poco habituada a consumir, por ejemplo, saltamontes-. Ellos sostiene que “necesitamos identificar urgentemente fuentes alternativas de proteínas, y los insectos tienen un gran potencial para contribuir a la seguridad alimentaria mundial”.
La FAO y Wageningen UR han definido para la conferencia de Ede una larga lista de objetivos. Entre éstos se cuenta obtener una visión general de la situación actual de los insectos como fuente de alimentos y forrajes; identificar las limitaciones en el desarrollo del sector de la alimentación con insectos (por ejemplo, legislación); promover la interacción entre las partes interesadas en la cadena de valor de los insectos; formular recomendaciones para aumentar el impacto del uso de los insectos como fuente de alimentación, y contribuir a la normalización de las metodologías para el análisis de la composición nutricional de los insectos.
Las ventajas de comer insectos
La FAO recuerda que existen más de 1.900 especies de insectos que son consumidos como alimentos por los humanos, principalmente en los países tropicales.
Hay una serie de ventajas de la utilización de insectos como fuente de proteínas por encima de los productos pecuarios, entre las cuales, se destaca que los insectos son animales de sangre fría, convirtiendo el alimento mucho más eficiente en la producción de alimentos; que los insectos comestibles emiten menos gases de efecto invernadero y de amoniaco que el ganado convencional; y que requieren menos espacio para producir la proteína.
La conferencia internacional y los documentos elaborados por la FAO recuerdan que, además de ser fuente directa de alimentación, los insectos pueden ser utilizados con facilidad y eficacia en la fabricación de forraje o alimento para ganado, substituyendo alimentos caros, tales como harina de pescado, harina de soja y cereales.