Brasil: Movimiento de los Sin Tierra y científicos piden apoyo del Papa Francisco contra los transgénicos
"Sabemos que el papa Francisco está muy interesado en estos asuntos. Con seguridad, si conversa con los científicos y percibe la importancia del valor ético del asunto y de pronunciarse sobre el mismo, lo hará", dijo Leonardo Steiner, secretario general de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil.
El Movimiento de los Sin Tierra (MST) de Brasil divulgó este jueves una carta que remitió al Vaticano en la que pide al papa Francisco apoyo en su campaña contra los cultivos transgénicos en el país.
En la misiva, respaldada por ocho científicos de seis países, movimientos sociales contrarios a los organismos genéticamente modificados piden que el pontífice le exija al Gobierno brasileño la suspensión de todas las licencias que ha concedido para el cultivo de transgénicos en el que es considerado como uno de los mayores graneros del mundo.
La carta fue presentada en una rueda de prensa ofrecida hoy en Brasilia por Joao Pedro Stédile, uno de los principales líderes del MST, y por el obispo Leonardo Steiner, secretario general de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB, episcopado), que la recibió y se comprometió a remitirla al Vaticano.
Los Sin Tierra lideran desde hace varios años una campaña contra los transgénicos por considerar que estos organismos pueden provocar daños en la salud y al ambiente, además de fortalecer a los grandes agricultores que se dedican a los monocultivos para la exportación y que tienen recursos para comprar las semillas modificadas.
Según los científicos que firman la carta, “las patentes de formas de vida y procesos vivos tendrían que estar prohibidas porque amenazan la seguridad alimentaria y promueven la biopiratería de los conocimientos indígenas y de los recursos genéricos”.
Alegan que los peligros de los transgénicos para la biodiversidad y la salud humana ya son reconocidos por algunos sectores en Gobiernos como los de Reino Unido y Estados Unidos.
El MST asegura que los organismos del Gobierno responsables del estudio y la aprobación de las autorizaciones para el cultivo de los transgénicos tienden a favorecer a las multinacionales que ofrecen las semillas genéticamente modificadas sin las evaluaciones necesarias sobre sus consecuencias sociales, económicas, políticas y ambientales.
Según el especialista en bioseguridad Rubens Onofre Nodari, investigador de la Universidad Federal de Santa Catarina, la carta menciona los resultados de varios estudios mundiales que han alertado sobre los peligros de los transgénicos.
“En el ámbito público el debate sobre los transgénicos ha sido muy limitado. Si conseguimos que la Iglesia (católica) se involucre, de pronto podemos sensibilizar a otros sectores de la sociedad sobre las amenazas generadas por los transgénicos”, afirmó Nodari al justificar el envío de la misiva al papa Francisco.
Agregó que, pese a la falta de consenso entre los científicos sobre la peligrosidad de los transgénicos, en los últimos años aumentó el número de estudios independientes que demuestran sus riesgos y efectos contrarios.
“Sabemos que el papa Francisco está muy interesado en estos asuntos. Con seguridad, si conversa con los científicos y percibe la importancia del valor ético del asunto y de pronunciarse sobre el mismo, lo hará. No hay duda de eso porque se trata de alguien que tiene posiciones y que ha dicho que la economía no se puede sobreponer a las personas”, dijo Steiner al recibir la carta.
El religioso agregó que puede discutir el asunto con el pontífice en una visita que realizará al Vaticano en septiembre.
Además de Nodari, la carta fue suscrita por la ingeniera agrónoma austríaca Ana María Primavesi; por el especialista en biología celular argentino Andrés Carrasco; por la doctora en genética molecular mexicana Elena Álvarez-Buylla Roces, por el investigador canadiense Pat Mooney, y por la física y filósofa india Vandana Shiva, entre otros.