Obama anuncia "nueva fase" contra el Estado Islámico
La decisión de Obama amplia el contingente estadounidense hasta unos 3.000 efectivos en territorio iraquí.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, considera que su decisión de duplicar en número de tropas en suelo iraquí en labores de asesoramiento y entrenamiento marca “una nueva fase” en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico, según aseguró en una entrevista emitida hoy en la cadena CBS.
El presidente, invitado al programa “Face the Nation” por su sesenta aniversario, insistió no obstante, en que en ningún caso los soldados entrarán en el campo de batalla.
Según detalló, los ataques aéreos que está llevando a cabo la de coalición internacional en Irak y Siria, liderados por las fuerzas estadounidenses, están siendo “muy eficaces” para frenar el avance de los yihadistas y ha llegado un momento en el que “se puede efectuar cierta ofensiva”.
“Ahora lo que necesitamos es que las tropas de tierra, las tropas terrestres iraquíes, puedan empezar a empujar de nuevo”, agregó.
Pese a descartar que Estados Unidos tenga militares luchando en el terreno, no descartó enviar más tropas.
“Como comandante en jefe nunca voy a decir nunca”, dijo al respecto.
La decisión de Obama anunciada el viernes, que amplia el contingente estadounidense hasta unos 3.000 efectivos en territorio iraquí, ha despertado la preocupación de que EE.UU. pueda volver a lanzarse a una guerra terrestre, pero la Administración ha insistido una y otra vez en que no desempeñarán un papel de combate.
Los militares estadounidenses trabajarán en las instalaciones de las Fuerzas de Seguridad iraquíes situadas a las afueras de la capital, Bagdad, y de la ciudad kurdo-iraquí de Erbil.
En paralelo, la Casa Blanca ha solicitado 5.600 millones de dólares adicionales al Congreso para combatir al EI, una petición que incluye 1.600 millones de dólares para establecer un fondo con el fin de entrenar y equipar al Ejército iraquí y las fuerzas kurdas, “ya que trabajan con el Gobierno de Irak para enfrentar” a los yihadistas.
Estados Unidos lidera una campaña de ataques aéreos, que comenzaron el pasado septiembre y que se lleva a cabo junto a una amplia coalición internacional contra posiciones de los yihadistas en Irak.
Aunque en un principio las fuerzas estadounidenses limitaron sus bombardeos contra el EI a Irak, el pasado 22 de septiembre empezó a liderar también una ofensiva contra los bastiones yihadistas en Siria.
La milicia suní ha ganado terreno en Siria gracias a la guerra civil que desangra al país, hasta hacerse con el control de vastas zonas del centro y este sirio, incluidos centrales energéticas y pozos petrolíferos.