Quién como ellos: Congreso trabajará sólo dos semanas en diciembre
El calendario de la Cámara de Diputados y el Senado pone en peligro la agenda legislativa del Gobierno para lograr aprobar las cinco medidas que programaron para antes del 31 de diciembre.
Diciembre será un mes tranquilo en los pasillos del Congreso. Los primeros días del mes no habrá sesiones de Sala ni comisiones ya que corresponden a “semana distrital”, periodo que cada cámara destina al trabajo en terreno. Pero no solo eso: para evitar interrumpir las sesiones normales con los feriados de Navidad y Año Nuevo, la Cámara de Diputados y el Senado dispusieron el año pasado que durante esos días habrá una extensa semana distrital, entre el 22 de diciembre y el 2 de enero.
Por lo tanto, teniendo en cuenta que el Congreso funciona solo hasta los jueves, los parlamentarios entrarán en receso legislativo a contar del 19 de diciembre hasta el comienzo del próximo año. ¿En resumen? La Cámara de Diputados y el Senado sesionarán solo dos semanas durante el próximo mes.
Lo anterior es particularmente complejo para La Moneda, teniendo en cuenta la premura que tiene el Ejecutivo por aprobar al menos cinco proyectos de ley prioritarios y comprometidos por la Presidenta Michelle Bachelet antes del 31 de diciembre y otros cuatro importantes antes del 31 de enero de 2015, algo que deberían desarrollar en solo algunas semanas previo al receso legislativo de febrero.
¿Sin vacaciones?
Tradicionalmente, febrero es el mes de receso absoluto en la Cámara de Diputados y el Senado. Tanto los parlamentarios, como comités y administrativos de ambas cámaras, se van de vacaciones ese mes. Sin embargo, en los últimos días comenzó a circular el rumor de que eso podría no ocurrir.
Para cumplir los tiempos de los proyectos que enviará el Gobierno -sobre todo avanzar en la Reforma Educacional-, La Moneda estaría evaluando una facultad exclusiva del Presidente de la República que establece la Constitución para convocar al Congreso durante febrero por la cantidad de sesiones que estime conveniente. Lo anterior nunca ha ocurrido desde el regreso a la democracia en 1990. En ese caso, los presidentes de ambas cámaras tienen la obligación de acatar lo que solicite la Presidenta.
Otra alternativa para que se pueda continuar sesionando durante febrero -y avanzar en los proyectos de ley- es que las comisiones de Régimen Interno de ambas cámaras aprueben por unanimidad cambiar el calendario definido hace un año, aunque el presidente de la Cámara lo ve como algo imposible. “Es difícil acordar algo así entre todos”, dice Aldo Cornejo.