El plan de “asociatividad” que busca rescatar a las galerías comerciales del centro de Santiago
La Dirección de Desarrollo Económico de la Municipalidad de Santiago, en conjunto con la Universidad Diego Portales, está impulsando un programa para que las galerías se establezcan como asociaciones y puedan postular a fondos para mejorar el servicio que ofrecen.
Las galerías que interconectan el centro de Santiago fueron promovidas durante la pasada década del ’30 por el arquitecto austríaco Karl Brunner, autor del Barrio Cívico, quien imaginó pasajes abiertos que conectaran las calles. Ahora la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, lanzó un plan que busca su rescate y reinvención en la moderna urbe.
La aparición de las galerías en Santiago se remonta a 1850, cuando se inauguró la entonces “Galería Bulnes” (hoy pasaje Matte) y vivió su auge a inicios de la década pasada cuando la red de pasajes en su conjunto llegó a sumar más de 5 kilómetros. Son construcciones emplazadas en bloques, en su mayoría de 8 pisos, que se dividen en un cuerpo inferior para el comercio, un espacio intermedio para oficinas, y uno superior para viviendas y terrazas.
Sin embargo, el uso de las galerías comenzó a ser desplazado con la aparición de las tiendas por departamentos. Y más últimamente por la proliferación de malls.
Ante este escenario, la Dirección de Desarrollo Económico de la Municipalidad de Santiago, en conjunto con la Universidad Diego Portales, está impulsando un programa para que las galerías se establezcan como asociaciones y puedan postular a fondos municipales para mejorar el servicio que ofrecen.
Habla Tohá: “Muchas galerías tiene un valor arquitectónico y patrimonial gigantesco… y en general están bastante bien mantenidas. Pero han tenido muy poca promoción. Se trata de un comercio muy típico de Santiago y la idea es que la gente pueda considerar a las galerías como una real opción a la hora de vitrinear y comprar”, publica La Segunda.
Añade que el público espera que le otorguen un servicio de calidad, con señalética, seguridad y baños, típicas cosas por las cuales hoy muchas personas tienden a preferir los malls. “Hoy no es posible que realicen grandes cambios o proyectos, porque los locales funcionan de manera separada, velan cada uno por sus intereses. Si se asocian, en cambio, pueden aspirar a más. Eso es lo que buscamos fomentar”, apunta la edil.
Elida Balocchi , administradora de la Galería del Angel, valora la iniciativa. “Se trata de una excelente noticia que, de concretarse, contribuiría al mejoramiento de las tradicionales galerías, revitalizando a todo el sector”.
La mujer pone el acento en el “lamentable” deterioro que presentan algunas de las galerías, sobre todo las históricas, lo que atribuye a la falta de recursos de las comunidades “Espero que todos los edificios que albergan galerías recibamos mayor información por parte de la municipalidad para poder sumarnos a este proyecto”.
El sociólogo Tomás Rojas, por su parte, quien se encuentra trabajando en un proyecto Fondart sobre los usos de las galerías y pasajes comerciales de Santiago Centro, señaló que si la iniciativa del municipio “sólo se refiere la posible asociatividad de las galerías, creo que mucho aporte no puede hacer”. El investigador elaboró un catálogo con las 26 galerías del centro y en mayo montará una exposición en el Palacio Consistorial.