Sacúdete en tu cripta: 5 cosas que Steve Jobs dijo que Apple jamás haría… pero ahora hace
En sus recordadas charlas Jobs siempre se encargaba de dejar claras sus ideas, las cuales por años serían los mandamientos de la empresa, algo que cambió luego de su muerte.
El genio de Apple, Steve Jobs, era un conocido testarudo, trabajólico y obsesivo. Siempre creía tener la razón de cómo tenían que ser los nuevos productos de la empresa y la mayoría de las veces la tuvo.
De hecho, el resurgimiento de la compañía a fines de los años 90 fue gracias a su regreso y el cambio de conceptos que realizó en una empresa que se encontraba en crisis. Hoy es una de las más emblemáticas a nivel mundial, con una legión de seguidores que ven a las ideas de Jobs casi como una religión.
Sin embargo, luego de la muerte del empresario en el año 2011, comenzaron a aparecer una serie de productos nuevos que simplemente no cumplían con los mandamientos que siempre siguió el líder de la empresa de la manzana. A continuación un repaso a esas cosas que Jobs afirmó que nunca haría y que hoy son utilizadas por la empresa en sus nuevos productos.
Lápices capacitivos (stylus)
Sin duda uno de los objetos más odiados por Jobs, quien no perdía ocasión para burlase de ellos y de los teléfonos inteligentes que los ocupaban. Estas burlas se dieron a conocer el 2007, mientras introducía el iPhone en la convención Macworld en San Francisco.
En ese lugar afirmó, que se trataba de un objeto inútil que siempre se perdía, y que nadie las quería, de hecho una de las primeras cosas que realizó al momento de volver a Apple fue eliminar los dispositivos que utilizaban este tipo de artículos como el Newton.
Tabletas pequeñas
Otro de los artefactos más detestados por Jobs eran las tablet con pantallas pequeñas. Sobre esto siempre afirmó que el tamaño mínimo que tenían que tener estos aparatos era de 10 pulgadas.
Además creía que la nitidez no era suficiente para aumentar la usabilidad de éstas: “a menos que la tableta incluya una lija para que puedas lijar tus dedos y reducirlos a una cuarta parte de su tamaño real” afirmó en una conferencia en el año 2010.
Agregando que “hay límites evidentes respecto a qué tan cerca puedes colocar elementos físicamente en una pantalla táctil antes de que a los usuarios se les dificulte tocarlos, seleccionarlos o moverlos“, afirmó el líder de Apple.
Pero sus palabras parecen no haber tenido tanta llegada, en este aspecto, dentro de la compañía, porque tan solo un año después de que falleciera Steve Jobs, Apple lanzaría el IPad mini, que se convertiría en el objeto de su tipo más vendido de la marca.
Teléfonos grandes
Cuando se dio el escándalo “Antennagate” del iPhone 4 de Apple, Jobs no perdió en ningún momento la oportunidad de burlarse de los teléfonos grandes como el Galaxy S, afirmando que simplemente “no cabían en la mano”, llamándolos además “Hummers”.
Pero se trataba de otra idea que al parecer no tenía mucha popularidad en la empresa, y tan solo un año después de la muerte de Jobs, se lanzó el iPhone 5 con una pantalla mucho más alta que su antecesor. Dando paso al reciente IPhone 6 que tiene una versión de 5,5 pulgadas.
Objetos de la vida real
Jobs siempre insistió que los desarrolladores de software imitaran en lo más posible a la vida cotidiana. Por ejemplo insistió que iCal estuviera basado en los asientos de su avión Gulfstream, o que el iBookstore contara con repisas de madera para dejar virtualmente los archivos o libros descargados.
Sin embargo todo esto quedó en el olvido cuando Apple presentó el iOS 7, el cual terminaba con cualquier vínculo con la vida real.
Filantropía
Fue una de las primeras cosas que hizo al volver en 1997, terminar con los aportes a causas benéficas en los cuales la empresa había estado por mucho tiempo. Uno de ellos era la colaboración con la organización creada por el cantante Bono: RED, la cual apoyaba la investigación en contra del Sida.
Esto no cambió ni siquiera cuando la empresa tuvo las mayores ganancias de su historia. Simplemente la cabeza de Apple nunca quiso despilfarrar en cosas que no producían dinero para la empresa.
Con la muerte de Steve, y llegada al mando de Tim Cook en 2011, los aportes benéficos volvieron.