Brutalidad humana: masacraron más de una tonelada de salmones sólo para obtener sus ovas
El presidente de la Asociación de Pesca Recreativa de Los Lagos, espera que esto no se considere como una infracción a la Ley de Pesca y Acuicultura, sino que sea calificado como un delito ambiental.
Durante un operativo liderado por personal de Carabineros, Sernapesca, un inspector municipal de Puerto Varas y un voluntario de la Asociación de Pesca Recreativa de Los Lagos, se pudo encontrar más de una tonelada de salmones Chinook los que habían sido capturados de manera ilegal en el río Hueñu Hueño en la provincia de Llanquihue.
La fiscalización comenzó pasada las 16:00 en el afluente del Río Petrohué, a una distancia de 15 kilómetros de la localidad de Ensenada. Luego de una hora de búsqueda, los fiscalizadores advirtieron la presencia de pescadores furtivos que estaban cazando salmones con elementos como ganchos y arpones, los que están prohibidos en el margen sur del río.
El jefe de la Tenencia de Carabineros de Ensenada, el teniente Cristofer Bustamante detalló que durante el procedimiento se acercaron de manera silenciosa para no alertar a quienes se encontraban cazando a los peces. “Al percatarse de la presencia policial, un grupo de cuatro sujetos se dio a la fuga abandonando en el lugar una gran cantidad de salmones en proceso de faena”, dijo a el medio Soy Puerto Montt.
Tras una persecución de más de medio kilómetro, que se realizó entre el bosque y el lecho del río, carabineros pudo capturar a tres hombres mayores de edad, quienes quedaron citados al Juzgado de Policía Local de Puerto Varas por infracción a la Ley de Pesca y Acuicultura.
Los ejemplares sacrificados corresponden a 78 salmones adultos con un peso aproximado de 15 kilos por pieza. También, se pudo decomisar más de 50 kilos de ovas encontradas al interior de un saco.
El presidente de la Asociación de Pesca Recreativa, Juan Andrés Gómez, quien fue parte del operativo señaló que “la extracción de estas especies afecta gravemente su ciclo reproductivo, ya que estos antisociales buscan exclusivamente las ovas en ríos tributarios para comercializarlas en el mercado negro, con fines que aún no podemos determinar”.
Debido a la gran cantidad de salmones sacrificados, Gómez detalló que comenzara una serie de acciones legales para conseguir que este tipo de hechos no se vuelvan a repetir, por lo que espera que esto no se considere como una infracción a la Ley de Pesca y Acuicultura, sino que sea calificado como un delito ambiental.
“Con la asesoría de un abogado, solicitaremos que el Juzgado de Policía Local de Puerto Varas se declare incompetente en este caso, para poder realizar la denuncia correspondiente ante el Ministerio Público”.