Y dicen no ser de derecha: secretario general de la UDI asegura que “se cuenta una parte de la historia, pero no el contexto” por Caso Quemados
A Guillermo Ramírez además se le inquirió respecto del rol jugado por diversos personeros de la Alianza en Dictadura. En este caso aprovechó de comparar la situación del país en ese entonces con el “ejemplo de lo que pasó en Alemania”.
Hace unos días el presidente de la UDI, Hernán Larraín, despertó todo tipo de comentarios en Twitter al asegurar que “yo no creo que la UDI sea un partido de derecha, como se mira normalmente a la derecha”.
Chile estuvo sumido en la incredulidad ante estas declaraciones de quien dirige ahora el partido fundado por el senador Jaime Guzmán, artífice de múltiples cambios instaurados en Chile bajo la Dictadura de Augusto Pinochet; entre otros, la redacción de la actual constitución, en 1980.
No obstante, esta incredulidad ahora contrasta de golpe con las declaraciones del secretario general de la colectividad, Guillermo Ramírez, quien estaba conversando en Radio Cooperativa sobre los históricos avances del Caso Quemados, indagatorias que buscan determinar las culpas de un grupo de efectivos del Ejército que en julio de 1986 quemó vivos a Carmen Gloria Quintana y a Rodrigo Rojas De Negri, quien falleció producto de sus heridas. Hoy cinco militares en retiro están siendo interrogados por el ministro en visita Mario Carroza y para mañana se espera que declaren dos más.
La entrevista inició con un pensativo Ramírez quien partió declarando que “la vida humana es sagrada y que la violencia política es inaceptable“. Luego agregó que la verdad es un imperativo moral “por las familias que necesitan dar vuelta la página de una vez por todas. Por los mismos victimarios. Con la verdad empieza la sanación espiritual, por una coherencia y consistencia histórica, uno se alegra que la verdad salga“.
Luego, con esa información sobre la mesa, el secretario general del gremialismo indicó que “estoy de acuerdo en que la historia tiene que enseñarse en su mérito, pero tienen que mantenerse las proporciones, porque hoy día se genera la sensación en muchas personas de que generalmente se cuenta una parte de la historia, que es una parte horrorosa de la historia y que lo que se cuenta es verdad, pero no en un contexto”.
Sus declaraciones también surgen en una conversación donde se le inquirió respecto del rol jugado por diversos personeros de la Alianza, como Alberto Cardemil y el fallecido Sergio Diez (ambos RN) así como también el histórico timonel del gremialismo, Jovino Novoa. Ramírez, abordando el punto anterior, aprovechó de comparar la Dictadura con el “ejemplo de lo que pasó en Alemania”.
“Una persona (Adolf Hitler) generó una Guerra Mundial, mató en campos de concentración a 6 millones de judíos, y estamos hablando de un Dictador en un país austral donde hubo 2 mil desaparecidos. Las dos cosas son horrorosas cualitativamente”, pero acotó que “cuantitativamente hay una tremenda diferencia”, ya que a su juicio “no son comparables desde la perspectiva cuantitativa, que finalmente hace que un proceso sea más fácil de llevar adelante y sea más evidente que el otro”.
A renglón seguido, Ramírez indicó que a principio de los años 90 muchas cosas no se sabían, pero que “de verdad había en ese minuto gente que creía de corazón que los temas de las violaciones a los derechos humanos eran casos aislados”.
En la misma línea indicó luego que algunas de las personas que trabajaron con Pinochet “nunca vio nada de aquello que no sabía la ciudadanía”. “No es automático decir Cardemil, Novoa o quien sea trabajaban en el gobierno; ergo, sabían, ordenaron, son violadores de los Derechos Humanos. Eso no se puede decir, porque es una irresponsabilidad muy grande. Puedes terminar castigando o enjuiciando a personas que de verdad, de buena fe, no sabían lo que estaba ocurriendo”.
Parte de estas declaraciones llegaron a oídos de la tía de Rodrigo Rojas De Negri, Amanda, quien aseguró que la derecha en Chile “no ha cambiado”.