Chahuán advierte sobre casos Penta-SQM-Corpesca: “Es muy posible que en varios casos no haya pena de cárcel”
El Fiscal Nacional se explaya por primera vez en profundidad, sobre su visión respecto de los casos que tienen contra las cuerdas la clase política. Además, aborda la visión que tiene de él en los medios de comunicación y también se refiere al fiscal Carlos Gajardo.
Son cerca de cuatro meses los que le quedan al Fiscal Nacional, Sabas Chahuán, en su cargo. Cuatro meses en los que buscará dejar lo más avanzado posible los casos Penta, SQM y Corpesca, ahora en aristas separadas, después de que sumara a la fiscal Ximena Chong al equipo conformado por sus pares Carmen Gloria Segura, Emiliano Arias, Pablo Norambuena y Carlos Gajardo. Y el equipo es proporcional a la cantidad de información que deben procesar. Tal es la carga que aclara a revista Capital cualquier rumor que pueda haber sobre su salud, y su ojo derecho que ha crecido en la medida que avanzan los días en los que tiene a cargo este caso: “es un tema gatillado por el estrés y es transitorio”.
Y es que en esta entrevista aborda prácticamente todos los temas que evita, o que responde con vehemencia, cuando es interceptado por la prensa en medio de las diligencias de estos escándalos de financiamiento irregular de la política.
Lo que era un comentario solapado hoy lo explica el Fiscal Nacional, quien hace un llamado al realismo jurídico, para contener las expectativas de la gente que espera prisión para los investigados por los casos mencionados. “Los delitos que estamos investigando, en abstracto, no tienen una pena muy alta. Si a eso agregamos que la mayoría de los imputados tienen una atenuante, irreprochable conducta anterior, y en otros casos pueden tener otra, y lo unimos a que la pena es baja, es muy posible que en varios casos no haya pena de cárcel”, indica.
Además, se refiere concretamente sobre el proceso que pesa sobre los dueños del holding Penta, Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín. Respecto que si ellos enfrentarán pentas de cárcel, indica que “puede que no pero también puede que sí”, pero esconde la manga al señalar que prefiere no referirse a personas concretas: “además soportar que el fiscal se refiera a él en una entrevista es un abuso”.
En el mismo plano de las expectativas, la máxima autoridad del Ministerio Público precisa que si éstas se generan, habrá que explicar y eventualmente precisar por qué estas personas no están en la cárcel o con pena efectiva. Sin embargo, recuerda que en algún momento un grupo de estas personas etuvo en prisión preventiva: “Esto no es pena anticipada, eso hay que tenerlo claro, pero ha sido una señal. No es lo que buscábamos, pero ha sido una señal. Algunos han dicho: por primera vez la justicia está atacando a todos por igual”, establecec Chahuán.
El “enfant terrible” del Ministerio Público
Han sido dos las veces en las que ha surgido el rumor de la renuncia del fiscal más visible de estas causas: Carlos Gajardo. La primera, cuando las indagatorias del caso SQM pasaron a manos de otro jefe regional de la repartición, el fiscal Andrés Montes -hijo del senador PS Carlos Montes-, por una decisión de la Fiscal Nacional Subrogante Solange Huerta, mientras Sabas Chahuán estaba fuera del país. Esto después se comunicó que supuestamente no había sido efectivo, y la segunda, con el caso Corpesca, que pasaba a ser asumido por su superior jerárquico, el fiscal regional oriente Alberto Ayala, pero por su vínculo con SQM al haber trabajado con la firma, la causa fue asumida por Chahuán, con el equipo integrado por Gajardo.
Al principio de la entrevista Chahuán hace frente a la exposición de los fiscales, sin individualizar a ninguno, y asegura que “no me gusta esto de los fiscales polilla”, calificativo que en diversos perfiles ha sido otorgado al flamante Carlos Gajardo, por su fuerte exposición y relación con los medios de comunicación, particularmente cuando encabezaba las diligencias del caso Penta.
Sin embargo, luego explica su visión de Gajardo: “es un gran fiscal”, y deja claro que no porque éste “no puede ir a la fiscalía, se paralizó la causa. Eso no es así. O que le encargue ciertas diligencias a alguno y digan: ‘no está Gajardo, le van a echar tierra’”.
Chahuán superstar
Yerko Puchento lo calificó como “héroe nacional”, palabras que son tomadas con “pudor” por el Fiscal Nacional, pero luego precisa que más bien sintió “derechamente vergüenza” y descarta cualquier viso de “show mediático”.
Además indica que se le considera el “Harvey Dent” chileno, sobrenombre que le han otorgado sus estudiantes de Derecho en la Universidad de Chile. Chahuán lo rechaza indicando que el personaje de los cómics de Batman “tiene dos caras y se volvió medio loco”, ya que finalmente buscaba justicia por sus propios medios.
El persecutor tiene claro que no verá el cierre de estas causas, las que serán asumidas por su sucesor, pero indica que buscará formalizar a todos los que pueda en SQM y que dejará “enrielada” esa investigación. En Corpesca formalizará a quien tenga que hacerlo. Que respecto de las querellas contra empresas como Ripley y Corpbanca asegura que citará a quien tenga que hacerlo y acusará a quien sea necesario.
Incluso se refiere a su relación con el Servicio de Impuestos Internos, haciendo frente a esta suerte de pugna para perseguir delitos tributarios: la persecución penal sólo se inicia cuando el SII ha presentado una querella o denuncia, hecho aún no ocurrido en el caso SQM con Giorgio Martelli, operador político de la Nueva Mayoría. “Si preguntas si está haciendo todo lo que la fiscalía quiere, no necesariamente, de la misma manera que la fiscalía no está haciendo todo lo que Impuestos Internos quiere, porque son instituciones autónomas”, precisa.
En un momento también se hace cargo de una antigua polémica. En plena investigación contra Fernando Karadima, Eliodoro Matte -emblemático empresario y uno de los que creía en la inocencia del cura, del cual se acreditó el delito de abuso sexual pero prescrito- le solicitó una reunión donde le planteó a Chahuán que ojalá se pudiera ver con delicadeza su caso: “Fue una reunión, no había ley de lobby, le dije que no podía hacer nada. No había nadie que lo estuviera haciendo y yo lo empecé a hacer”.