Carabineros justifica procedimiento que provocó muerte de trabajador y Burgos anuncia sumario

Esta madrugada, de acuerdo a un parte policial, un grupo de trabajadores contratistas de Codelco, paralizados desde principios de esta semana, realizaron bloqueos en los caminos que daban al acceso a la división El Salvador de la cuprífera. Carabineros intentó dispersarlos, y entremedio, dos trabajadores, entre los que habría estado Nelson Quichillao, tomaron máquinas y habrían embestido en contra de los policías, quienes abrieron fuego e impactaron a los dos trabajadores. Quichillao recibió un balazo en la ingle y murió esta madrugada.

La institución justificó el uso del armamento de servicio de su personal en el procedimiento ocurrido en el kilómetro 2 de la Ruta C-183, que une la localidad de El Salvador con la mina del mismo nombre.

En el comunicado de la III Zona de Carabineros “Atacama” se explica que “durante la noche de este jueves 23 de julio, conforme a la normativa legal y reglamentaria hubo necesidad de despejar la ruta bloqueada, momento en que los manifestantes atacaron violentamente a los carabineros que resguardaban el lugar, embistiéndolos con maquinaria pesada de faena minera -cargadores scoop- poniendo en grave riesgo la vida del personal institucional así como de los mismos manifestantes”.

“Ante el incremento de esta violencia y agresión, se debió hacer uso del armamento de servicio, disparando hacia las máquinas, para detener su accionar”. El segundo afectado se recupera de sus lesiones que serían de mediana gravedad.

“Para esclarecer las circunstancias en que ocurrieron estos hechos, Carabineros ha puesto y pondrá todos los antecedentes al tribunal correspondiente y al Ministerio Público, sin perjuicio de las indagaciones administrativas internas que se realicen”, manifestó la III Zona.

“La institución respeta el legítimo derecho de manifestarse a los ciudadanos, pero también, al mismo tiempo, tiene la obligación de restablecer el orden público cuando éste ha sido quebrantado, con los elementos de protección autorizados por ley”, enfatizó la policía uniformada.

Un recuerdo inconcluso

Hoy, junto con lamentar la muerte de Nelson Quichillao, el titular de Interior Jorge Burgos anunció que los hechos “están siendo motivo de una investigación por el fiscal local de la comuna de Diego de Almagro quien ha otorgado una orden de investigar a la PDI”. Además, descartó otorgar calificativos a lo ocurrido, ya que la investigación esclarecerá si la acción fue o no legítima.

Burgos sostuvo que “todos los elementos que sean necesarios para la investigación como corresponde, serán entregados por Carabineros, por la empresa, al fiscal local, quien dentro de su competencia autónoma desarrollará esta investigación, sin perjuicio de lo cual en la institución policial se ha iniciado un sumario administrativo”.

Escenario similar al que existió después de la lesión de Rodrigo Avilés el pasado 21 de mayo. El ultimátum lo dio el subsecretario de Interior Mahmud Aleuy el 2 de junio de este año, para que Carabineros entregara los resultados, y los responsables, después de que anunciaran la realización de un sumario administrativo por la lesión que tuvo postrado durante dos meses a Rodrigo Avilés. Burgos, entonces nuevo ministro de Interior, relativizó el ultimátum y aseguró que estos procesos tenían sus propios plazos. Pese a la recuperación de Rodrigo, su familia sigue persiguiendo a los responsables, y dudan que hayan resultados concluyentes en el sumario, presuntamente a entregarse este lunes.

La familia de Nelson Quichillao, quienes viven en el sur del país, se encuentran trasladándose a El Salvador para trasladar los restos de Nelson Quichillao a La Serena, donde recidía hace años, según plantea Radio Bío-Bío. En este momento, en palabra de su sobrino, Hardy Cárdenas, su familia está analizando interponer acciones legales en contra de quienes resulten responsable del hecho.