Cuatro consejos para controlar tus celos en redes sociales y no quedar de sicópata
Hoy un mensaje comprometedor en WhatsApp o en Facebook puede ser tan complicado como ser pillado en el acto.
Los tiempos han cambiado para los mal portados. Años atrás las infidelidades eran descubiertas en el acto mismo, pero eso se amplió a las redes sociales. Así lo afirma a BioBioChile Valeria Schapira, experta en relaciones de Match.com, el sitio donde miles personas buscan pareja.
Por eso hoy, encontrar un mensaje comprometedor en WhatsApp u otra red social, puede ser tan doloroso como encontrar a tu pareja engañándote físicamente.
Datos entregados por una encuesta realizada por el mismo portal, revelaron que el 48% de las personas cree que las redes sociales pueden arruinar una pareja, siendo mayor la proporción de hombres (65%) que de mujeres (35%) que piensan así.
Esto hizo que surjan una serie de dudas sobre si realmente debiéramos tener celos los mismo que sentimos en el mundo real que en las redes sociales. O no deberíamos tomar en serio los jugueteos que puede tener nuestra pareja con otras personas en la red.
Por eso la experta señala cuatro puntos que debemos tener presentes cuando comencemos a sentir celos de los que veamos en la red.
1. Cada pareja es un mundo
En primer lugar la especialista señala que “para bailar el tango hacen falta dos y son estos dos (ustedes, en este caso), los que escriben su propio contrato”.
“Puede que hayan acordado tener una de las llamadas ‘relaciones abiertas’ y la lleven adelante en armonía. Puede también que un simple mensaje detone un infierno. Cuando las cosas están claras entre adultos y el juego honesto está planteado de antemano, cada quien tiene la facultad de decidir si quedarse o retirarse”, afirma Valeria Schapira .
2. Hay que respetar los acuerdos
“La mayoría de quienes descubren los flirteos virtuales de su pareja dice sentirse muy lastimado, tanto como si la hubiera descubierto teniendo sexo con un tercero. Es importante que cada pareja establezca sus propias reglas de convivencia y las respete. Allí donde se cruza el umbral del respeto, comienza la desconfianza y es imposible construir vincularmente”, comenta la representante del sitio de citas.
3. El diálogo es esencial
“Es probable que quien esté dedicándose a los jugueteos virtuales lo haga producto del aburrimiento, del hartazgo de la rutina, o con la sola finalidad de probar que su poder de seducción sigue vigente. Y con esta conducta, esté generando un daño irreparable en su relación y lastimando a aquel o aquella en quien genera falsas expectativas del otro lado de la pantalla. Se impone una charla sin máscaras para entender las razones de estos escarceos online. Lo que surja de ese diálogo sincero – y con seguridad doloroso – puede ser la semilla del renacimiento de la pareja o el camino hacia el final”, señala Valeria.
4. ¿Cómo está la relación?
Si bien, un coqueteo a través de Internet que no termine en un encuentro físico posterior puede que no sea de gran importancia. Sin embargo, esto mismo puede indicar que existen una serie de problemas que es muy posible que no hayas tenido en cuenta.
“¿Qué es lo que no está funcionando en la relación para, por un jugueteo, poner en vilo a una pareja e inclusive a una familia con niños? Cuando hay una buena construcción de base, no hay redes sociales que sean capaces de desunir lo que el buen amor ha unido”, asegura la experta.
Ante una situación así Schapira señala que la mejor opción es conversar el tema y buscar ayuda externa, preferentemente con un psicólogo o un terapeuta.