Columna de El Mundo asegura que Bachelet dimitirá dos años antes de terminar su mandato
El texto fue escrito por el ex director del diario español y columnista, el chileno John Müller, después de que visitara nuestro país la semana pasada.
Una serie de rumores rondan alrededor de la Presidenta Michelle Bachelet. Asediada por los bajos resultados de las encuestas, presionada por una coalición de gobierno totalmente chúcara, y con un terrible suspenso ante el futuro penal de su hijo, Sebastián Dávalos, investigado por el caso Caval.
Hace semanas que estos trascendidos -ya que nadie se hace cargo con nombre y apellido de esto- se centran en una eventual depresión que estaría sufriendo la mandataria. Más que mal: la semana pasada acusaron a Dávalos de haber solicitado formatear su computador en medio de las indagatorias del que es objeto un negocio inmobiliario de la empresa de su esposa, Natalia Compagnon. Terrible para una madre ver en una situación compleja a su retoño.
Y parte de estos rumores son los que estructuran una columna escrita por el ex director adjunto del diario español El Mundo, John Müller. Este periodista chileno, originario de Osorno, analiza el actual mandato de Bachelet sobre la base de la última encuesta Adimark, que situó a la Presidenta con la desaprobación más alta jamás registrada en el sondeo: 72%.
Además menciona que su popularidad se fue destruyendo por “un programa maximalista radical que no interpreta a todos los chilenos, una mala lectura de la coyuntura económica internacional que ya en 2014 se volvió adversa para Chile (baja del precio del cobre, debilidad de su moneda) y la elección de colaboradores muy mediocres.
Müller también se hace cargo del caso Caval, sentenciando que el mayor daño a Bachelet se lo hizo Dávalos. “Que su propio hijo pasara en pocas horas a formar parte del 1% más rico del país contra el que Bachelet había hecho campaña exigiendo que pagaran más impuestos para mitigar las desigualdades, sentenció el programa electoral de la Nueva Mayoría y de paso a Bachelet, que no se ha recuperado del impacto“.
En la misma línea enumerativa del artículo, luego toma la “quitada de piso” que la mandataria hizo de los ministros más relevantes, quienes llegaron tras el cambio de gabinete: Jorge Burgos, en Interior, y Rodrigo Valdés, en Hacienda. “A los pocos días desautorizó a uno de ellos y debilitó al otro, razón por la cual ambos llevan todo este tiempo intentando recomponer su autoridad. Uno de sus nuevos colaboradores le hizo un flaco favor al comentar públicamente un rumor que circula desde hace meses por la red whatsapp y que fue convertido en historia política de primera plana por un diario digital, según el cual la presidenta estaría con una fuerte depresión“, se explaya Müller.
Lo más delicado llega en el penúltimo párrafo: “Se habla de golpe blanco contra la presidenta y en los corrillos políticos que dimitirá después del 11 de marzo de 2016 para permitir que el Congreso elija a un sucesor por lo que resta de su mandato“.
La duda que instala Müller, en función de sus argumentos, es totalmente atendible, ya que asegura que la incertidumbre continuaría y que se acerca la fecha en que Dávalos debiera ser imputado o absuelto “por tráfico de influencias. Si se formaliza la acusación, la continuidad de la presidenta parece muy difícil”.