El Papa Francisco es más famoso que los Beatles
Newsweek analizó en un extenso artículo al máximo hombre de la Iglesia Católica. "Quizá los Beatles hayan sido más famosos que Jesucristo, pero algunos piensan que el Papa hoy ya es más famoso que los Beatles", publicó.
La inminente llegada del Papa Francisco a Estados Unidos sigue generando revuelo. Al igual que en otras partes del mundo, el perfil “aperturista” del prelado de la Santa Sede despierta tal atracción en fieles y no creyentes que la revista Newsweek apeló a una sutil comparación para dar cuenta de esta popularidad: “Quizá los Beatles hayan sido más famosos que Jesucristo, pero algunos piensan que el Papa hoy ya es más famoso que los Beatles”.
La extensa nota publicada ayer refleja la expectativa que tienen en el Sumo Pontífice de Roma los liberales progresistas de San Francisco. La ciudad estadounidense no es una más: fue el epicentro en los años 60 y 70 de los movimientos juveniles de protesta y de liberación sexual – como el hippismo o el activismo gay-. En la localidad se encuentra el famoso barrio Castro, hoy uno de los destinos turísticos privilegiados de la comunidad LGBT.
El Papa liberal
Jorge Bergoglio causó impresión en la ciudad californiana, además de sus numerosos gestos que lo emparentan con parte del discurso del progresismo social, por su relativa “comprensión” hacia las preferencias homosexuales.
“El Papa le lavó los pies a presos, musulmanes y mujeres. Rechazó sus vestiduras resplandecientes, eligió como vehículo un Ford Focus con cinco años de antigüedad, y una casa modesta; criticó el calentamiento global y la desigualdad; habló sobre los divorciados e incluso dijo que él no era nadie para juzgar a los gays”, enumeró el autor de la nota, Alexander Nazaryan, sobre los distintos gestos del papado de Francisco desde el 2013.
La pregunta
En el artículo, sin embargo, se pone de relieve la aparente discordancia entre lo que postula Francisco y el credo católico, que impugna la homosexualidad como opción de vida. “¿Es el Papa católico?”, dispara la portada de la revista. Y, al lado, explica: “Claro que lo es. Pero no lo sabrías tan sólo leyendo los recortes de la prensa”.
Al respecto, el cronista destaca la convivencia del papa Francisco con la figura de Salvatore Cordilone, arzobispo de la homónima ciudad de la Costa Oeste, que sería una suerte de antítesis de Jorge Bergoglio debido a sus opiniones ultraconservadoras.
Cordilone, que fue nombrado por el papa Benedicto XVI, mantiene según Newsweek un “tradicionalismo sexual que va en contra del tono de tolerancia de Francisco”. Cordileone marchó en contra del matrimonio igualitario en Washington y dijo que el sexo gay y la masturbación son “demoníacas”. Además, el obispo había resaltado que la “erosión del matrimonio tradicional” da lugar a una “reversión al paganismo de antaño” y podría, en una sociedad posmoderna, llevar a prácticas como el “sacrificio de niños o la adoración de mujeres sacerdotes”.
“Cordileone ha sido demonizado tan a fondo como Francisco fue exaltado. Algunos dicen que los dos no pueden pertenecer a la misma Iglesia”, indaga el cronista.
Para Cordilone, sin embargo, no hay contradicción entre lo que profesan él y Francisco. “El Papa no está cambiando el Evangelio. Para el mundo secular, es un renegado que pronto va a ordenar a mujeres sacerdotes y levantar la bandera de los gays en el Vaticano. Para los observadores más perspicaces, es un guardián experto de la historia del catolicismo. Si es superior a Cordileone en algún aspecto, es el de las relaciones públicas”, aseguró el prelado de San Francisco.
Matrimonio igualitario
En este sentido, Newsweek recuerda que también Bergoglio se opuso al matrimonio igualitario en 2010, cuando la ley se estaba discutiendo en Argentina. “La boda gay es la pretensión destructiva del plan de Dios”, había escrito el entonces arzobispo de Buenos Aires.
“El papa Francisco no nos está pidiendo que cambiemos las enseñanzas atemporales del Evangelio”, afirmó Cordileone. “Por el contrario, quiere que las proclamemos abiertamente”.
Por lo tanto, la nota se pregunta “cuán serios” son, entonces, los cambios que impulsa el papa Francisco.”¿Va a cambiar las bases doctrinales del catolicismo? ¿Ordenar a mujeres sacerdotes?¿Darle la bienvenida a los gays? ¿Hará cambios significativos en el Vaticano?”, cuestionó.
Y concluye en una reflexión que no agradaría al progresismo y liberalismo norteamericano: “Probablemente no. La historia de la iglesia y la personal de Jorge Mario Bergoglio dicen que no”.
“Este Papa es un excelente comunicador. Él hace un guiño a los dos sectores de su rebaño, como un político que espera conseguir votos en las ciudades liberales con un mensaje y en las regiones rurales conservadoras con otro. A ambos lados se les hace sentir que tienen al verdadero Francisco”, finaliza el periodista de Newsweek.