La hermosa historia de adopción y reinserción social de “Diente de Sable” debería hacerte llorar de alegría
Después de tres años de rehabilitación y trabajos comunitarios que lo llevaron a pasar de ser el perro más temido de Antofagasta al más querido de Chile, el carismático "Diente de Sable" encontró hogar, trabajo, y un amigo que comparte su historia de vida.
La historia comienza el 2012 con sonido de ladridos y bocinas y un perro mestizo parecido en sus colores a un pastor alemán, pero más flaco y menos peludo, que a mordiscos se hizo un lugar en la prensa local de Antofagasta. Su ferocidad lo hizo acreedor del nombre “Diente de sable” como el felino prehistórico de largos colmillos como cuchillas. Fiel a su nombre, “Diente” era un implacable cazador de autos. La mayoría los persigue ladrando sin saber por qué, “Diente” no. “Diente” los perseguía para morder las ruedas, patentes y parachoques.
“Diente de sable” estaba furioso y no tenía problema en demostrarlo. Aunque por fuera parecía que sólo quería ver el mundo arder, en el fondo, sólo quería un hogar.
Después de hacerse conocido a nivel nacional gracias a la repercusión que tuvieron sus apariciones en la Estrella de Antofagasta, la municipalidad tomó cartas en el asunto. Después de una corta mas intensa persecución y búsqueda “Diente de sable” fue capturado y puesto bajo custodia del canil municipal.
Y ahí, privado de libertad, su fama en vez de extinguirse creció a niveles insospechados. Se convirtió, lentamente, en un símbolo de la ciudad y probablemente el perro callejero con más apariciones en la prensa de la historia de este país. El municipio, encabezado por la alcaldesa Karen Rojo (en la foto), así lo entendió y comenzó a aprovechar la fama de “Diente“.
“Diente” que en su momento fue un temido y perseguido infractor de la Ley, se convirtió en la mascota de la ciudad. Luego de recibir tratamiento sicológico y ser esterilizado, encabezó corridas para humanos con sus mascotas, campañas de adopción de mascotas, campañas playeras para el cuidado de los animales durante el verano, charlas para aprender a pasear a los perros y hasta carreras con obstáculos.
Llegó a tanto su fama, que LUN lo consideró uno de los 33 personajes más importantes del año 2013.
Pero algo faltaba. Tras los onderos lentes de sol que en su momento le pusieron y que en la foto de abajo luce, “Diente” llevaba dentro una extraña nostalgia por algo que nunca había tenido: un hogar.
Lograr su adopción no iba a ser algo fácil. No porque sus antecedentes no lo ayudaban. Eso ya había quedado atrás. El problema era que el municipio no iba a soltarlo así como así. Para el centro de tenencia responsable de animales de la Municipalidad antofagastina “Diente de sable” era más que un peludo rostro publicitario. Era un símbolo. La posibilidad de dar un ejemplo a nivel nacional. Hubo varias familias postulantes, pero ninguna que cumpliera con las necesidades de un perro como “Diente“. El principal obstáculo: el perro, de cinco años de edad aproximadamente, necesitaba de un patio amplio para correr. Su condición de macho alfa, aunque castrado, así lo dictaba.
Aunque operado, su condición de macho alfa, paradojicamente, castraba sus posibilidades de encontrar casa.
Hasta hoy. Porque después de tres años de rehabilitación y trabajos comunitarios, “Diente de sable” vuelve a la portada de “La Estrella de Antofagasta” con una excelente noticia: encontró casa, y no sólo eso, también trabajo : )
Dos meses le costó a la Asociación de Industriales lograr convencer al Centro de Educación en Tenencia Responsable (ex Canil Municipal) de que contaban con la infraestructura y las condiciones necesarias para adoptar a “Diente”. Hasta que con firma de papeles, chip, y vacunas, “Diente” llegó a la Asociación. Héctor López, guardia del lugar donde por estos días se realiza la Exponor, contó a La Estrella que le habían pedido al jefe traer otro perro guardían para que acompañara a “Sonrisas”, el rubio que sale en la foto junto a “Diente“. “Cuando nos dijo que iba a ser él quedé helado”, confiesa. El encuentro fue algo tenso, “Sonrisas” tiene una historia similar a la de “Diente“, sólo que menos mediática. Sin embargo, cuenta López, ahora son partners y colegas.