Nueva Mayoría pone en duda votos para Fiscal Nacional por ser primo de presidente de Penta

La declaración se repetía: “el Senado no es un buzón”. De esta manera el presidente del PPD, Jaime Quintana, graficaba su molestia con La Moneda, a causa de la sorpresa que recibió la clase política la semana pasada.

Contra todo pronóstico, la Presidenta Bachelet nominó al director ejecutivo del Ministerio Público, Jorge Abbott Charme, al cargo de Fiscal Nacional, el que debe ser ratificado por 25 votos en la cámara alta.

Su nombramiento fue inesperado, a causa de que hace semanas los senadores discutían entre sí una suerte de nombre de consenso entre ellos, que correspondía al Fiscal jefe de la Unidad de Alta Complejidad de la Zona Centro-Norte, José Morales. Inevitablemente este nuevo proceso terminó mezclándose con el fracaso que sufrió el gobierno con el rechazo de Enrique Rajevic a la Contraloría, y antes de que el Senado lo sentenciara el rumor que surgió fue fuerte: votamos por su contralor y nos respaldan al fiscal.

Aquello no resultó, y si bien la mandataria habría tenido buena impresión de Morales (también habría considerado al fiscal regional Sur, Raúl Guzmán), quiso dar una señal de autonomía y nominó a Abbott, al que se le considera como una suerte de continuador de la gestión de Sabas Chahuán, actualmente máximo persecutor del Ministerio Público, quien encabeza todas las indagatorias que tienen que ver con el presunto financiamiento irregular de la política.

Y como si fuese un deja vu, desde el Senado empezaron a elevar las mismas críticas que se le hicieron a La Moneda para la nominación de Rajevic: falta de diálogo con los parlamentarios.

En ese sentido, tal como en la votación del Contralor, aquí también surgió un dato, una excusa perfecta para esgrimir y justificar una eventual negativa de apoyo al candidato a Fiscal Nacional que propuso Bachelet: Resulta que Alfredo Moreno Charme, ex ministro de Relaciones Exteriores del gobierno de Sebastián Piñera y actual presidente de empresas Penta -investigadas por presuntos delitos tributarios que tendrían que ver con el financiamiento irregular de actividades políticas- es primo del candidato a Fiscal Nacional, que “heredará” la dirección de las indagatorias que tienen contra las cuerdas a la clase política.

“¿A quién no le puede hacer ruido una situación como esa? (…) ¿Qué es más delicado: que un grupo de senadores haya estado dispuesto a entregar apoyo a uno de los postulantes o que uno de los postulantes tenga una red de apoyo en un grupo empresarial que está siendo investigado?”, disparó Quintana.

A su voz se sumaron la del senador Alejandro Navarro (MAS), quien indicó, según La Tercera, que este asunto “es una pésima señal ciudadana. Uno no elige a los parientes, pero es un dato que debió haberse tenido en cuenta”.

Aún existen dudas respecto del apoyo que daría la DC a Abbott, pero la jefa del comité de ese partido, Carolina Goic, indicó que se respaldaría al candidato del gobierno, para evitar una nueva derrota del gobierno, tras el bochorno protagonizado por el ministro de Interior, Jorge Burgos, en la votación por el candidato a Contralor. En el PPD dieron libertad de acción a sus militantes, en tanto que dos de sus senadores, Felipe Harboe y Ricardo Lagos Weber confirmaron su voto a favor.

Las “cartas bajo la manga”

Las tratativas del gobierno están a toda máquina. Este miércoles en la mañana se presentará Abbott ante la Comisión de Constitución del Senado para presentar su plan para encabezar al Ministerio Público en en la tarde se votará. La Moneda necesita 25 votos de 37 legisladores, y como se adelantó que se inhabilitarán o abstendrán Fulvio Rossi (investigado en el caso SQM), Jorge Pizarro (sus hijos están siendo indagados) y Carlos Montes (su hijo, Andrés Montes, es fiscal regional), el escenario se ve complejo, ya que es un quórum muy alto. Por lo tanto, en las negociaciones no puede olvidarse a la derecha, donde algunos parlamentarios de RN se han manifestado a favor de Abbott, mientras que en la UDI exigen imparcialidad (esta colectividad es la más afectada por el caso Penta) y han mantenido su eventual apoyo o rechazo en suspenso.

Pizarro en su momento adelantó que posiblemente se abstendría, pero si es que hacen falta votos, sufragará de todos modos. El Mercurio afirma que la situación sería similar a la de Carlos Montes, ya que por ley ninguno está en la obligación de abstenerse a causa de los vínculos mencionados.

¿Y qué pasará con este parentesco de Jorge Abbott con Alfredo Moreno?

Aún es una incognita. Lo que es un hecho, de momento, es que Moreno no está siendo indagado en ninguna de estas causas, aunque la empresa que preside sí. Cuando se han dado situaciones complejas en el Ministerio Público, de amistades, parentesco o vínculos de negocios pasados entre los persecutores, regularmente estos se inhabilitan para que otros tomen su lugar y continúe la investigación. Tal como pasó con el ex fiscal regional Oriente y actual fiscal regional de Antofagasta, Alberto Ayala, quien al haberse desempeñado como abogado en SQM, optó por inhabilitarse, lo que dio paso para que Carlos Gajardo volviera a asumir la entonces arista del caso Penta, pero ahora con Sabas Chahuán como titular de la causa.

Por tanto, perfectamente Abbott podría delegar la causa en diversos fiscales, como quienes actualmente llevan esta investigación, que son Ximena Chong (Corpesca), Carlos Gajardo y Pablo Norambuena (Penta) y Emiliano Arias con Carmen Gloria Segura (SQM). Sin embargo, Carlos Gajardo ha manifestado interés en dirigir la Fiscalía Oriente, y Emiliano Arias ha hecho lo propio con la Fiscalía Occidente. Esos nombramientos deberán ser resueltos por el actual máximo persecutor Sabas Chahuán, y recién ahí se podría aseverar qué es lo que ocurrirá con esas causas.