Detalles del patético espectáculo que dio una vez más el Pastor Soto en el Centro de Justicia
Los hechos ocurrieron a la salida del Centro de Justicia, donde se pospuso un juicio oral contra Soto, originado en una querella por injurias, calumnias y acoso que Rolando Jiménez presentó en su contra.
Javier Soto, el autodesignado “pastor” evangélico , denunciado en varias ocasiones por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), volvió a agredir verbalmente al líder de la entidad, Rolando Jiménez, al que acusó de pervertido y pedófilo.
Los hechos ocurrieron a la salida del Centro de Justicia, donde se pospuso un juicio oral contra Soto, originado en una querella por injurias, calumnias y acoso que Jiménez presentó en su contra. El juicio oral fue aplazado hasta el 20 de noviembre próximo debido a que no fueron notificados algunos testigos.
El Movilh pide una condena de tres años y un día de presidio, además de una multa y las penas legales accesorias contra Soto, que suele estar acompañado de acólitos que graban y fotografían los incidentes que, biblia en ristre, desata su líder.
Soto intentó abalanzarse sobre Jiménez cuando este daba declaraciones a periodistas y al ser impedido su avance por varios activistas del Movilh, el evangélico lanzó agresiones verbales contra el dirigente. En medio de empujones, Soto gritó en varias oportunidades “¿Cuál es el interés con nuestros niños, Jiménez”?.
El acoso se extendió por varios metros, mientras Soto insistía con gritar a Jiménez “pervertido” y “no al fascismo sexual infantil”, al tiempo que pisoteaba y escupía la bandera del arcoíris donde había escrito la frase “no a la perversión”.
Con sus dichos, el evangélico aludía a “Nicolás tiene dos papás“, el primer cuento infantil chileno de la psicóloga Leslie Nicholls, sobre diversidad sexual y familias homoparentales, el que ha sido distribuido gratuitamente en centros educativos.
“Una vez más queda en evidencia que Soto agrede e injuria a mi representado en términos personales. Esperamos que sea condenado por los tribunales”, indicó el abogado del Movilh, Jaime Silva.
En tanto, Jiménez afirmó que los “acosos permanentes” de Soto “resultan en extremo incómodos. Es un molestia encontrarse en la vía pública con este sujeto y que te grite acusaciones delante de otras personas. Esto es a todas luces discriminación e injurias y deseo profundamente que los tribunales hagan justicia”.