Sacerdote Gerardo Joannon volvió a Chile tras período de reflexión por adopciones irregulares
El cura fue sobreseido por la justicia civil a causa de que los delitos por los que se le investigó estarían prescritos. Algunas de las personas familiares de estas guaguas que fueron dadas en adopción consideran que el cura estaría “en franca rebeldía”.
El escándalo de las adopciones irregulares en nuestro país, que se llevaron a cabo entre los 70’s y 80’s, se dio después de la declaración y la entrega de antecedentes relacionados con personas que, en el contexto de un embarazo presuntamente no deseado, tomaban al bebé y lo daban en adopción a través de una serie de procedimientos anómalos. En estos, muchas veces se notificaba el fallecimiento del recién nacido, cuando éste en realidad había sido entregado a otra familia, a veces incluso en el extranjero. Esto se daba por diversos acuerdos entre notarios, hospitales, e incluso sacerdotes.
En este último aspecto, uno de los protagonistas de estas tramas, el sacerdote Gerardo Joannon, quien habría liderado una red de adopciones irregulares entre los años 1975 y 1983, fue sancionado a pasar por un “proceso de reflexión” por parte de la congregación de los Sagrados Corazones, después de que la investigación eclesiástica comprobó la participación del cura en estos delitos.
Sin embargo, Canal 13 reveló que Joannon habría regresado hace más de un mes a Chile, interrumpiendo este proceso de reflexión, el que se estaba llevando a cabo en Argentina.
Joannon hasta el día de hoy niega haber recibido sanción alguna.
La tía de una de las guaguas que se entregaron en adopción, Josefina Rillón, aseguró que el sacerdote estaría “incumpliendo el castigo que le había impuesto la congregación. O sea, está en franca rebeldía”.
La Congregación, por su parte, indicó que Joannon solicitó un permiso especial de ausencia, ya que estaría buscando salir de su congregación.
La investigación que llevó adelante el ministro en visita Mario Carroza llegó a la conclusión que el sacerdote debía ser sobreseído ya que los delitos estarían prescritos.