Ocho imágenes asquerosas que muestran cómo quedó la Ruta 68 tras la peregrinación a Lo Vásquez
La carretera que recibe a religiosos y deportistas durante su cierre vehicular siempre tiene un invitado de piedra: la basura.
Como sucede todos los años, casi un millón de personas se lanzaron a pie a la ruta 68 en dirección al santuario de Lo Vásquez a pagar y o pedir nuevas mandas a la Virgen. Para esto se cierra el tránsito de vehículos por dicha carretera, oportunidad que es utilizada también por miles de ciclistas para hacer un pedaleo extremo entre Santiago y Valparaíso.
La festividad es entonces una bonita combinación entre espiritualidad y deporte. Pero tiene un lado oscuro: la falta de basureros y/o la sobra de basura provoca que todos los años ésto sea el último protagonista de la jornada y que durante dos días, cientos de funcionarios municipales tengan que recoger las casi veinte toneladas de desperdicios que se acumulan en los alrededores de Casablanca y sobre todo en un radio de cerca de dos kilómetros alrededor del santuario donde se instala una gigantesca feria.