Comida chatarra y alcohol. Esa era la dieta que seguía hasta hace cuatro años Michael Sullivan cuando pesaba 107 kilos y era víctima de bullying. Debido a esto comenzó a sentirse muy solo, sobre todo porque no conseguía llamar la atención de las mujeres. Es por eso que decidió dar un giro radical en su vida.
“Puedes decir lo que quieras, cuatro años después estoy en control de mi destino. Aquí estoy y no he terminado“, consigna el joven de 23 años en una de sus tantas fotografías en Instagram donde publica y compara su estado físico.
El irlandés, en un principio, partió con ejercicios dos veces al día y cambió su alimentación. Su principal desafío, según señaló al The Telegraph, fue aprender sobre nutrición ya que aunque “te mates” en el gimnasio, no conseguirás nada si no sabes alimentarte con los nutrientes necesarios para tener un cuerpo saludable.
Como no sabía nada, todo comenzó como una especie de “ensayo y error”, ya que no quiso tomar en cuenta los consejos de otras personas y quiso él encontrar su propio método.
Actualmente pesa 92 kilos pero de puro músculo, lo que lo llevó a firmar como modelo hace poco tiempo, callando a todos los abusadores que lo humillaron tiempo atrás.