Ex Secom analiza la salida de Riquelme de La Moneda: “Esta crisis tiene más de burbuja que de realidad”
Además, Carlos Correa aseguró que la salida del administrador de La Moneda no es comparable con el estallido del caso Caval que vivió desde el interior del Gobierno.
El miércoles, el ministro del Interior Jorge Burgos informó a la prensa de la renuncia de Cristián Riquelme a su cargo dentro de La Moneda, el que hará efectivo mañana cuando Michelle Bachelet retorne de sus vacaciones. Su salida se efectúa en medio de los cuestionamiento a su participación en el caso Caval y los dineros que recibieron dos empresas suyas hace algunos meses.
Carlos Correa, ex Secretario Comunicacional de La Moneda, quien vivió desde al interior del Ejecutivo el estallido del caso que involucró al hijo de la Mandataria hace un año, hoy analiza lo ocurrido esta semana “desde afuera”.
En entrevista con El Mercurio, el actual consultor de comunicación estratégica en Qualiz, sostuvo que la salida del administrador de La Moneda y el estallido de Caval no son comparables ya que “la crisis del caso Caval afectaba directamente al hijo de la Presidenta, que aparecía vinculado a un negocio millonario de especulación inmobiliaria y, por lo tanto, implicaba un riesgo serio a la confianza de la ciudadanía en la Mandataria“.
“En el caso de Riquelme, yo coincido con la tesis de Alberto Mayol respecto de que el director administrativo de La Moneda no tiene un rol preponderante en la agenda del Gobierno y que, por lo tanto, esta crisis tiene más de burbuja que de realidad“, añade.
Así mismo, criticó la demora en que se dio a conocer su renuncia, lo que abrió la posibilidad a las especulaciones en la prensa, “algunas de ellas inverosímiles. Se llegó a hablar incluso que un funcionario de menor rango podría tener la capacidad de chantajear a la Presidenta. Eso es más propio de un guion de una serie de Netflix que de la realidad política de Chile”.
Respecto al rol que jugó Jorge Burgos en esta situación, inidicó que “fue prudente en no anticipar juicios sobre el director administrativo“. En cuanto a la frase “parto inducido” utilizada por el secretario de Estado, afirmó que “comunicacionalmente, el Gobierno y la Nueva Mayoría debieran cerrar el caso y dejar que la Contraloría investigue si hubo comportamiento irregular”.
Antes de concluir, se dio el tiempo para defender a la jefa de Gabinete de Michelle Bachelet, Ana Lya Uriarte, en cuanto a si la salida de Riquelme podría significar la eventual salida de otros personeros cuestionados dentro del Ejecutivo.
“He sido crítico del rol excesivo que se ha autoasignado el llamado “segundo piso” en relación con los ministros y ministras. Pero no por ello dejo de pensar que la vinculación que se trató de hacer con Ana Lya Uriarte es una infamia. Trabajé con ella y puedo afirmar con plena certeza que es una persona proba“, dijo.