Estudio predice cómo sería la educación de las próximas generaciones en 2035

Predecir el futuro es imposible. Así mismo lo reconoce la ONG estadounidense Getting Smart, dedicada a estudiar temas relacionados a la educación. Sin embargo, lo que pueden hacerse son algunas proyecciones basadas en cómo van avanzando las tecnologías y las sociedades y eso es justamente lo que hizo la organización al plantear en un estudio cómo sería la educación en en el mundo en 2035.

Mientras aquí ni siquiera sabemos en qué terminará la reforma educacional del gobierno de Michelle Bachelet, estas son las proyecciones que hace la ONG para gran parte del mundo desarrollado.

Acceso a la educación

A través de una postulación en base al ingreso familiar, estarán disponibles oportunidades de aprendizaje sencillo para cada niño de entre tres y cuatro años.  Los días de las cinco pantallas simultáneas serán lo usual para la mayoría de quienes aprenden. Con esto se refieren a tecnología del tipo móvil, de producción, visualización y presentación. Todas trabajarán sin problemas.

La banda ancha estará disponible casi siempre, incluso en lugares rurales. Habrá comandos visuales, gestuales y a través de teclados de la próxima generación, mientras que la escritura caligráfica estará en clases de Arte. Muchas de las cosas que usamos y con las que interactuamos entrarán en contacto con nuestros asistentes inteligentes. La realidad virtual será una parte de la exploración del mundo cada día.

Educación virtual

Plataformas de aprendizaje virtual van a usar motores de recomendación y programación dinámica para sugerir programas de aprendizaje a los alumnos. Estos tendrán su propio perfil en la plataforma, que va a capturar datos en tiempo real y van a proporcionar un feedback inmediato con sus resultados y progresos. Cada alumno tendrá un portafolio virtual donde se verán las referencias con las que trabajó para cumplir con sus tareas y los objetivos cumplidos.

El tiempo y los espacios de aprendizaje van a ser muy distintos a los de hoy. Los centros educacionales van a ser reemplazados por construcciones con grandes espacios abiertos enfocados a que los alumnos estudien en ambientes comunitarios, colaborativos y virtuales. Algo así como la oficinas de Google o las de la Factoría Italia.

Las opciones de aprendizaje van a continuar creciendo: los estudiantes de educación secundaria van a poder optar por muchas ofertas formales e informales de educación, como por ejemplo escuelas online, especialistas en educación diferencial, experiencias de viaje-estudio y trabajo, y mucho más.

Objetivos: ¿Sumar, restar y leer?

Habilidades como la autogestión, el bienestar, la gestión de proyectos, la participación ciudadana y la colaboración serán objetivos básicos del desarrollo educacional que serán evaluados como cualquier otra materia. Hablar fluidamente dos o más idiomas será una expectativa común también.

La ciencia de datos, es decir, ser capaz de analizar gráficos por ejemplo, y visualizarlos, será una habilidad mucho más necesaria e importante que codificarlos, ya que esto se hará por medio de máquinas. Emprender, crear y cambiar organizaciones, construir modelos sustentables de negocio, e innovar y crear valores agregados, será un objetivo común de los estudiantes, quienes buscarán obtener un certificado y profundizar en eso.

Todo lo que tiene que ver con la expresión, la capacidad de crear y compartir música, el arte y el lenguaje, será ampliamente desarrollado y tendrá una amplia gama de opciones y oportunidades combinadas en la educación.

Relaciones entre educadores y familia

Los asesores educacionales ayudarán a los estudiantes y sus familias a navegar por todas las opciones de aprendizaje que ofrece el sistema virtual, como crear planes de educación superior, y conectarse con otro tipo de servicios. El monitoreo virtual va a ser frecuente y poderoso. A través de este sistema siempre estarán conectados los profesores, los padres y los estudiantes.

Asistentes inteligentes, como por ejemplo, un robot de Mark Zuckenberg, van a hacer recomendaciones de aprendizaje y de experiencias, agendarán eventos y ayudarán a conseguir material para el aprendizaje.

Será común que negocios y organizaciones de alto impacto provean a los estudiantes de proyectos a corto plazo para que tengan experiencias de trabajo. Así adquirirán conocimientos y habilidades para contribuir al progreso.

¿Habrá que seguir yendo al colegio?

Los centros educacionales seguirán existiendo. A pesar de que los colegios dejarán de ser un lugar donde se va aprender y se convertirán en un servicio que incluirá también aspectos virtuales, los padres valorarán enviar a sus hijos al establecimiento. Estos lugares, como se dijo antes, serán abiertos, flexibles y reconfigurables. Incluirán muchos más centros deportivos.

¿Bastará con el título universitario?

Salir del colegio y de la universidad seguirá siendo importante. Pero entre medio habrá una serie de otros logros que también adquirirán importancia, como haber obtenido distintas credenciales en la carrera por competencias en distintas áreas. El mercado valorará no solo el título obtenido, sino que el portafolio del estudiante, las distintas credenciales obtenidas y las referencias en muchos otros campos.

El aprendizaje permanente será la misión de la mayoría de las universidades donde los certificados y títulos iniciales serán sólo el comienzo de una asociación de desarrollo a largo plazo. 

Comunidad escolar

Existirá la capacidad de incubar herramientas, talentos y ambientes de aprendizaje en la mayoría de las áreas metropolitanas. Pensiones transferibles, acuerdos de reciprocidad, y sistemas de reconocimiento de profesionales permitirán a los profesores hacer clases en distintos lugares y moverse incluso de una región a otra.

Esas son algunas de las predicciones hechas por la ONG. Para leer el estudio original, haz click aquí.