La iniciativa gratuita de tatuadora chilena para víctimas del cáncer de mama

Cerca de cuatro mujeres mueren al día en Chile producto del cáncer de mama, una enfermedad que si bien detectada a tiempo tiene un 98% de sobrevivencia, en muchos casos avanza de manera silenciosa, volviéndose potencialmente mortal.

Ahí el camino se vuelve más difícil, con un tratamiento que en muchos casos termina con una mastectomía y cicatrices que se transforman en signos de una guerra ganada, donde persiste el dolor de haber perdido algo esencial en su cuerpo.

Reconstrucción

Precisamente son estas marcas las que cientos de artistas alrededor del mundo están ayudando a sanar con una disciplina que trasciende lo estético y que se pone al servicio de estas mujeres que pasaron por  un proceso doloroso.

Carolina Ramírez es tatuadora y el año pasado decidió realizar un pequeña campaña que cambiaría para siempre la vida de una decena de mujeres que lograron vencer el cáncer en Temuco.

Su idea era simple: ofrecer gratis la reconstrucción del pezón a las mujeres que debieron pasar por una masectomía y sobrevivieron al cáncer. Todo esto inspirado trabajo del tatuador Vinnie Myers, quien comenzó a realizar este tipo de intervención a mujeres, que incluso habían pasado en más de una oportunidad por el quirófano.

Con esta guía como comenzó a trabajar en las reconstrucciones en su local ubicado en el sector de Fundo El Carmen, en la capital de La Araucanía.  Hasta ahí se acercaron  mujeres que dejaron atrás sus prejuicios para atreverse con una intervención que les permitiría borrar las huellas que la  enfermedad dejó en su cuerpo.

“Muchas llegaron acompañadas de su familia, era una situación muy emotiva donde a veces me tuve que aguantar las lágrimas. La gente agradecía mucho esto incluso traían regalos“, cuenta Carolina, quien quiere reactivar esta iniciativa dentro de las próximas semanas.

“La campaña se hizo conocida acá el año pasado y varios imitaron la idea en el resto de Chile, pero en realidad no sé quienes sigan con ella“, señala Carolina, que se vio enfrentada a diversas dificultades durante el proceso.

“Una de las cosas más difíciles era igualar el color del pezón, eso puede demorar cerca de una hora, el resto del trabajo toma alrededor de 40 minutos”, explica. Después de esto logra a través de la pintura imitar el pezón que perdieron, dando incluso la impresión de relieve sobre la piel.

Entre los requisitos que pide Carolina está el que la enfermedad haya sanado por completo y que la operación esté correctamente cicatrizada.

Quienes quieran realizar este procedimiento solo deben contactarse con la artista a través del sitio de  Facebook de Amonet Tatuajes. Tal como señala el afiche que publicó durante el año pasado.

Iniciativa

La idea si bien tuvo algo de repercusión el año pasado, todavía no es muy conocida dentro de los artistas tatuadores. Sin embargo, al relatarles la experiencia de Carolina, dicen sentirse entusiasmados para realizar algo parecido.

Tal fue el caso de los  integrantes de Dead Queen Tatto Studio, quienes conversaron con El Dínamo acerca de esta iniciativa. “Es bonito hacer algo que supere un fin estético porque sabes que eso puede cambiar la vida de alguien”, señalan.

“En realidad el tatuaje se divide en varias ramas, hay una parte que se utiliza por moda, otra por simbología, pero aquí se trata de mejorar su autoestima y su problema de vida“, afirman interesados en la idea.

Aun así tienen claro que este tipo de trabajos tiene algunos riesgos. “Creo que lo más complicado es incorporar la cicatriz al tatuaje, para que no se note, porque si se mete un diseño plano es posible que la herida siga visible, en cambio si se incluye la forma de la cicatriz va a pasar inadvertido con el diseño”, especifican.

“Lo otro importante antes de realizar algo así es investigar la diferencia entre un queloide y una cicatriz, porque si uno tatúa una zona de la piel sin sanar se van a generar problemas, por eso es importante también hablar con un dermatólogo antes”, señalan, y agregan que no tendrían problemas en participar en algo así que va en beneficio de  quienes han sufrido una enfermedad tan dura como el cáncer. “Nosotros encantados nos sumaríamos a  una campaña así a nivel nacional”.