Movimiento Estudiantil y Gratuidad universal
Aquí lamentablemente se pretende un igualitarismo, y la única igualdad que realmente es fundamental es la igualdad ante la ley. Todos los seres humanos por mucho que les moleste a muchos, tenemos capacidades diferentes y no todos pueden o tienen la condición, capacidad y la disciplina para ser técnicos o profesionales.
José Francisco Cuevas Vila es Ingeniero Comercial Magister en Economía UNAB -IEDE, Cursando Maestría en Política Económica en el SMC University
Uno de los grandes problemas que han tenido los 2 últimos gobiernos, ha sido lidiar con un movimiento estudiantil muy radicalizado. Si bien sus demandas son legítimas, también lo son las demandas en salud, vivienda y previsión. Además de mayor apoyo a las regiones por parte del gobierno. No quiero utilizar la palabra “demandas justas”, ya que entraríamos en temas de filosofía moral y no creo que esa sea la solución.
El problema es que lamentablemente los recursos no caen del cielo y nunca hay los suficientes para todos. Entonces debemos priorizar porque para alcanzar la gratuidad se deben sacar recursos de otra parte. Y lógicamente nadie quiere ceder en ningún beneficio social. Por tanto como sociedad deberíamos plantearnos si realmente estamos dispuestos a financiar la educación superior de algunos en desmedro de apoyar a las personas con mayores necesidades. Mejorando las pensiones de nuestros adultos mayores, ampliando la cobertura en salud de los más pobres y mejorar las condiciones de vivienda de las personas que viven de allegados o en condiciones precarias.
Es fundamental comprender que el estado no genera recursos, simplemente administra los impuestos que como sociedad pagamos y dichos impuestos deben ser gastados de la forma más eficaz socialmente. Por tanto parece absurdo destinar recursos a la educación superior, cuando tenernos un sistema de salud tan deficiente y un sistema de previsión en que donde nuestros pensionados reciben pensiones miserables.
El otro gran problema de estas conquistas sociales es que los que estudien querrán titularse, ya que de lo contrario que sentido tendría estudiar sin lograr algún grado académico. Y lamentablemente la única opción para titularlos a todos será bajar la exigencia. Esto perjudicara a los profesionales y técnicos ya titulados, y claramente será un favor muy barato para los futuros egresados.
Aquí lamentablemente se pretende un igualitarismo, y la única igualdad que realmente es fundamental es la igualdad ante la ley. Todos los seres humanos por mucho que les moleste a muchos, tenemos capacidades diferentes y no todos pueden o tienen la condición, capacidad y la disciplina para ser técnicos o profesionales.
Por último y quizás lo mas importante por mucho que las demandas sean legitimas, no pueden como mecanismo de presión obligar a una mayoría a subsidiar a una minoría movilizada.