Adopta un negrito

Travieso, antes de tener este nombre, era un perro que vivía en la calle. Tiene sólo cinco meses y estaba de allegado en una caseta de guardias de un condominio en La Dehesa. Es el típico quiltrito negro de pelo corto y tieso, con colores beige en su cara. Convivía, además, con una manada de perros salvajes, los que regularmente son alimentados y cuidados por unas personas del sector, pero que a diferencia de él, no han podido ser domesticados y mucho menos rescatados.

Un día este tierno cachorro tuvo la suerte de toparse con alguien que justamente andaba buscando un perro como él. Esa persona quería uno que tuviese menos posibilidades de ser adoptado y Travieso era uno de esos, pues según lo que muchos rescatistas cuentan, por su color oscuro y además por ser mestizo, son los menos requeridos, ya sea través de la difusión por las redes sociales o en las jornadas de adopción.

Travieso, por fortuna, hoy tiene un hogar y estará protegido en este frío invierno y en los que muchos otros que se vendrán, además de tener comida, amor y todos los cuidados que un animal de compañía requiere. Suerte que otros abandonados tal vez nunca tendrán.

El rescate y adopción de perros y gatos se ha transformado en uno de los temas principales para las personas que se preocupan del bienestar de los animales abandonados y callejeros en nuestro en país. Dentro de esta inquietud, hay un tópico que se analiza mucho y es el por qué es más difícil que se adopten animales de color negro. Un claro ejemplo de esto ha sido Celia, una linda negrita mestiza que fue rescatada.

Su historia comenzó una noche, hace ya dos meses, cuando Kristel Garrido estaba junto a su pololo en casa. De pronto, escucharon unos aullidos que venían desde la calle y salieron para ver qué pasaba. Había una pequeña perrita siendo acosada por casi diez perros, pues esta se encontraba en pleno estado de celo. Kristel, quien es rescatista y presidenta de la Fundación RDA (Rescate y Defensa Animal Chile), tomó a Celia y la llevaron a casa para resguardarla.

Lamentablemente, ellos no podían quedarse con ella, pues ya tienen otros animales rescatados, por lo que tenían que buscarle un hogar. Ellos sabían que junto con esto, se venía todo el proceso de llevarla al veterinario para un chequeo, vacunas y posterior esterilización, para así dejarla apta para ofrecerla en adopción a una familia responsable. El problema es que por más que la difundieron a través de las redes sociales y otras formas de promoción, nadie ha preguntado por ella. Kristel piensa que principalmente nadie la quiere por su color de pelo:

Banny Mérida, de la agrupación Floridanimal es otra activa rescatista de animales abandonados y tiene la misma percepción que Kristel. Para ella, el hecho que las personas prefieran un animal de pelo claro a uno negro puede ser porque el cerebro decodifica los tonos y colores de manera distinta, de manera tal que se tiende más a asociar lo claro con algo positivo, bueno o bonito y lo negro con lo negativo. Claro ejemplo de esto es la antigua y ya prácticamente obsoleta superstición que los gatos negros “dan mala suerte”:

Además, sostiene que, es muy común que al momento de pensar en adquirir un perro o gato se piense erróneamente en él como un peluche o juguete. Esa proyección se da especialmente con los blanquitos pequeños y de pelo largo o crespo, por eso suelen ser los más solicitados cuando se ofrecen en adopción. Es muy común también la cosificación de los animales de compañía y se tiende a verlos más como una especie de adorno o accesorio, especialmente cuando se piensa en ellos como un regalo para niños en su cumpleaños o para navidad:

¿Qué ventajas podemos encontrar al tener un típico animal negrito de pelo corto y quiltro y que resulta ser el menos cotizado por quienes buscan uno para adoptar? En general, son menos propensos que un perro blanco a sufrir cáncer a la piel y su pelo no se enreda, por lo que no necesita peluquería, en caso de no contar con los medios para pagar este servicio de por vida que sí requiere uno típico crespo de pelaje largo.

Erwin Flores, médico veterinario señala que, en promedio los perros mestizos poseen mayor vigor híbrido, algo que se presenta especialmente por el entrecruzamiento de genes y que se da en todas las especies animales, lo que hace que se llegue a una media que en general los hace más resistentes y adaptables. Ahora, si nos vamos a lo más esencial, buscando alguna particularidad específica, los perros de razas tendrían ventajas por sobre los quiltros. Por ejemplo, si se requiere un perro con mejor olfato, visión, velocidad, capacidad de integrar nuevas órdenes, función de guarda y defensa, etc; una raza podría presentar con más intensidad la expresión de esa característica, pero tal vez podría ser deficiente en otras. En el perro mezclado, el poseer más diversidad genética y por lo mismo un mayor vigor híbrido, lo hace más resistente en promedio y con un desarrollo generalizado de funciones. En resumen, lo híbrido les da fuerza de adaptación.

Detengámonos a pensar bien al momento de decidir adoptar un animal, y si es prioritaria esa carga estética o inclinación al momento de elegir uno. Es totalmente válido tener un gusto determinado por una raza o color, pero si esto no es necesariamente así, pensemos que la calidad de cariño y compañía no está determinada por el aspecto físico y, a veces, inconscientemente o por seguir una moda, nos dejamos guiar por una fijación totalmente prescindible. Y como siempre se ha resaltado acá, es muy importante enfocarse esencialmente en poder proveer al animal de los cuidados y espacio necesarios para él. Si esto no se puede llevar a la práctica, mejor no tener uno.

Celia, mestiza y negrita ya está lista para ser entregada en adopción. Ella se encuentra esterilizada, desparasitada y con todas sus vacunas al día. Tiene 10 meses y pese a su carácter tímido, es muy amigable y cariñosa. Además se lleva bien con otros perros y con gatos también. Si quieres adoptar, puedes escribir a adopciones@rdachile.cl. Va a estar feliz: