Todo es favorable para lograr la gran disidencia al Duopolio
Los resultados obtenidos por la disidencia del Colegio de Profesores, no es casualidad, no es una coyuntura, no es una grieta en el sistema, es un trabajo responsable, es una construcción de años, es un proyecto conjunto de diversas culturas, de diferentes formas, de distintos mundos, es la convergencia de la necesidad y el deseo.
Octavio González Ojeda es Presidente del Partido Humanista
No solo en nuestro parlamento, no solo en los municipios, también en el mundo gremial, encontramos las prácticas mañosas y abusivas de personajes que buscan la tan conocida y añeja costumbre de perpetuidad en el cargo.
Preocupados de mantener el poder y el prestigio, hacen brutalmente mal uso y abuso de sus facultades, vieja escuela con personajes narcisistas, que elección tras elección, simplemente colocan en marcha maquinarias electorales, cual Goliat, infranqueables, indestructibles, amos y Señores de todo.
Hace un par de años, en el parlamento Gabriel Boric, Giorgio Jackson, Vlado Mirosevic. En las municipales, Jorge Sharp (Valparaíso), Gonzalo Montoya (Macul), Gerardo Espíndola (Arica) y hoy Mario Aguilar, nuevo presidente del colegio de profesores, son suaves brisas, en medio de una contaminación asfixiante.
Aires limpios en el magisterio, nuevo momento.
La historia del Colegio de Profesores es valiente, con sentido de futuro, vital en el apoyo de las movilizaciones estudiantiles, como la del 2006, fundamental en establecer y fundamentar los derechos de los profesores.
En los últimos 10 años, la escasez de convicciones, los magros acuerdos políticos con el gobierno, las irresponsabilidades, llevaron al gremio a tener un escaso respaldo de los propios profesores, solo la fuerza interna disidente, logró levantar y mantener en pie, temas fundamentales como; la Carrera Docente, la mayor virtud de la disidencia fue la construcción de propuestas desde la misma base, con los profesores y para los profesores de nuestro país.
Los resultados obtenidos por la disidencia del Colegio de Profesores, no es casualidad, no es una coyuntura, no es una grieta en el sistema, es un trabajo responsable, es una construcción de años, es un proyecto conjunto de diversas culturas, de diferentes formas, de distintos mundos, es la convergencia de la necesidad y el deseo. La necesidad de cambiar a los de siempre y el deseo profundo que David exista!
Nos gusta creer, que esta forma, que este trabajo, que este resultado, es una señal fuerte y muy clara, para que los que estamos fuera del duopolio, podamos comprender, procesar y finalmente, construir la tanta necesaria Disidencia al duopolio, esto, no aisladamente, sino en convergencia.
Con generosidad, diversidad, valentía y trabajo, se renueva la fe y la esperanza. Otro Chile, es posible.
