Cámara de Diputados financiará instalaciones de nuevos parlamentarios con más de $1.200 millones
El dinero logró reunirse gracias al plan de austeridad impulsado por la mesa directiva liderada por el presidente Osvaldo Andrade y los vicepresidentes Marcos Espinosa (PR) y Gabriel Silber (DC).
En 2014, La Moneda impulsó la reforma que puso fin al sistema binominal y aumentó la cantidad de parlamentarios, advirtiendo que no se solicitarían recursos adicionales a Hacienda. Es por eso que la mesa directiva de la Cámara de Diputados inició un “plan de austeridad” que incluía diversas medidas para ahorrar gastos.
Entre ellas se encontraban, por ejemplo, la prohibición a los legisladores de viajar en clase ejecutiva con pasajes costeados por el Congreso, recortes en gastos de alimentación y la no renovación de los automóviles utilizados por la mesa. Esto, con el fin de reunir recursos para financiar a los 35 nuevos diputados que se sumarán en marzo de 2018.
Es así como el miércoles de la semana pasada, según dio a conocer el diario La Tercera, un oficio de la subsecretaría administrativa de la Cámara dio cuenta que la ejecución presupuestaria de la Cámara en 2016 considera un saldo final de $1.244 millones, producto de los ahorros que impulsó la mesa liderada por el presidente, Osvaldo Andrade (PS), y los vicepresidentes Marcos Espinosa (PR) y Gabriel Silber (DC).
El dinero, según se dio a conocer en la sesión de la Comisión de Régimen Interno del miércoles, se destinará para la habilitación de las dependencias para los nuevos diputados en el edificio del Congreso en Valparaíso, para lo cual se enviará un oficio a la Dirección de Presupuestos (Dipres), dependiente del Ministerio de Hacienda, para que lo autorice.
“Estos $ 1.200 millones se destinarán a la implementación de las nuevas oficinas, readecuación del hemiciclo de la corporación, redistribución de las salas de los comités parlamentarios y otras adecuaciones que deben estar listas en marzo de 2018”, explicó Silber, agregando que “estos son los resultados concretos de la política de austeridad que implementamos, en línea de cumplir con el compromiso de que el cambio al binominal no irrogue gastos adicionales para el erario nacional”.
Pero se vienen más desafíos: un informe realizado por la Biblioteca del Congreso dio cuenta de que en el caso de que las dietas parlamentarias y las asignaciones no varíen, cada nuevo diputado tendrá un costo mensual cercano a los $25 millones, llegando en total a los $10 mil millones anuales, contando a los 35 nuevos parlamentarios. Eso sí, el informe, en todo caso, no consideró los gastos en infraestructura y nuevas instalaciones.