La caricaturesca “nueva derecha” de Felipe Kast

En el marco del Día Internacional de la Mujer, y en un contexto más bien dulzón y repleto de lugares comunes, de pronto apareció un video extraño, inentendible, en el que aparecía un tipo queriendo hacerse pasar por algo que a él le parecía algo así como una “lo femenino”. Era un señor, el diputado Felipe Kast, el que se intentó disfrazar de una errada idea sobre lo que es el mal llamado sexo débil, dando así un mensaje torpe y equivocado, pero sobre todo caricaturesco.

No es primera vez que Kast juega con esto de los disfraces. Cuando fue el titular de Mideplan durante el gobierno de Sebastián Piñera,en 2010 y en el marco de la Enade de ese año, tuvo la “genial” idea de contratar a un actor, vestirlo de pobre y ponerlo a pedir dinero a la salida de dicho ese evento. Según él quería que los millonarios empresarios de este país tuvieran una idea de lo que es la pobreza y la importancia de esta, como si poniendo a un tipo que simulaba carecer de los bienes básicos pudiera solucionar un problema social. Creyendo que su compromiso con esa problemática dependiera de lo efectista que la volvía a ante las cámaras de la televisión.

Algo así pasó con este video. Parecía que sus palabras, en las que decía querer un país mejor para las mujeres, se veían opacadas por el ridículo que estaba haciendo en las imágenes, como también por la curiosa idea que tiene sobre el feminismo y las reivindicaciones de este, la que alimentaba un mal guión de una mala comedia que ni siquiera hubiera tenido cabida en la televisión de los 90.

Pero esto no es tan raro en el sector que representa Kast, y menos en esta “nueva derecha” que solamente maquilla las trancas moralistas de la antigua. Porque si el diputado hubiera salido con el rostro limpio y diciendo que apoyaba el derecho más básico de la mujer, el cual consiste en poder decidir sobre su cuerpo, a lo mejor habría sido más creíble. Tal vez habría sincronizado con ese público femenista al que tan desesperadamente quiere llegar, pero al que tan difícil se le va a hacer si es que no deja de lado la pirotecnia y comienza a entender lo que realmente se está demandando.

Pero eso al precandidato parece no importarle. Parece creer que la temática social, cualquiera que sea esta, es algo que debe visibilizarse de manera somera, sin ninguna profundización y solamente con el objetivo de dar por visto un tema en la gran lista de supermercado que debe ser su programa de gobierno.

No sé si será el subconsciente de la derecha, pero pareciera que todo aquello de lo que dicen preocuparse, y realmente no les importa, les saliera mal. Como si toda la supuesta solemnidad que intentaron darle a un video de tan baja factura se cayera de inmediato, al momento en el que le pones click. Al instante en el que entiendes que el mensaje que se está tratando de enviar se sustenta en una base tan débil y modesta en cuanto a argumentación.

Felipe Kast es otra muestra de que hay una derecha que intenta, al igual que él en el video, vestirse con ropas que le quedan incómodas al simular como si las disfrutaran. Ya que pretende camuflar sus verdaderas ideas con tal de acercarse de manera bastante superflua a las del progresismo, o a las de una especie de derecha menos “derechizada”, sin siquiera detenerse a comprender el fondo, lo que, al igual que en este caso, los hace parecer como lo que vemos hoy en día: una triste caricatura.