Jacqueline Van Rysselberghe se las cobra al fiscal Gajardo y le habla de “sus amigos en el PS”

El caso Penta aún es motivo de discusión en distintos círculos políticos, por mucho que el ruido que genera no es ni comparable a lo que ocurría a fines del año 2014.

Y más de algún dirigente de oposición se pregunta el por qué de esto. Ya que si bien existen antecedentes como para indagar a personeros de la Nueva Mayoría -principalmente presentes en el caso SQM- la cantidad de formalizados en esta indagatoria es menor a la que afectó al caso que toma su nombre por la firma de los empresarios Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín.

Son múltiples los motivos por los que el caso SQM no ha tenido el mismo avance de Penta. Entre otros, la declaración de Hugo Bravo, fallecido ex ejecutivo del holding, versus el silencio de Patricio Contesse, otrora gerente general de la minera no metálica, sumando además la inacción del Servicio de Impuestos Internos.

Sin embargo, a partir de la revelación de las inversiones del Partido Socialista en múltiples empresas -las que posiblemente podrían haber sido incluso fiscalizadas por algún militante de la citada colectividad, a través de alguna superintendencia – dirigentes de la UDI comenzaron a emplazar al fiscal Carlos Gajardo, persecutor del caso Penta, enrostrándole una suerte de “falta de impulso” en indagar a personeros de la Nueva Mayoría.

Una de estas es la presidenta del gremialismo, Jacqueline Van Rysselberghe, la que manifestó a La Segunda que “nos llama la atención que el fiscal Carlos Gajardo, siempre que hay un tema periodístico que involucra a la oposición en materia de platas, actúe de oficio para investigar, y ahora con esto de Mega en cambio está calladito. Estamos esperando a ver qué hace para que demuestre que la fiscalía actúa por principios y no por sesgos políticos, queremos que demuestre que no es que tenga amigos en el PS”.