Así era el estilo de vida que tenía Ricardo Palma Salamanca hasta antes de ser detenido
Para obtener dinero y vivir, el ex frentista se dedicó principalmente al arte en Francia y en México estuvo escribiendo columnas.
Este viernes se confirmó la detención de Ricardo Palma Salamanca, sindicado como el autor material del asesinato de Jaime Guzmán, después de 21 años prófugo.
“El Negro”, como lo apodaban, escapó de la Cárcel de Alta Seguridad en helicóptero el 30 de diciembre de 1996, donde cumplía dos condenas a cadena perpetua: primero, por delitos de asociación ilícita y el secuestro terrorista de Cristián Edwards del Río. La segunda, en tanto, fue por su autoría en el atentado terrorista donde murió el senador gremialista.
Los equipos de inteligencia de la PDI estuvieron seis meses siguiendo los pasos del ex frentista en el país galo. De esta manera, lograron determinar que Palma ingresó con una identidad mexicana, Esteban Solís, y se dedicó al rubro del arte. Vendía pinturas e incluso, realizó exposiciones en galerías especializadas. Todo esto, con el fin de obtener dinero, según la investigación del juez Carroza, consignó La Tercera.
En México utilizó la misma técnica: en San Miguel de Allende vivió bajo la identidad de Esteban Solís Tamayo, colaboró como fotógrafo de la revista Espiral, la que era dirigida por Ramón Guerra, identidad mexicana que utilizaba Raúl Escobar Poblete, el reconocido como el “comandante Emilio”, y que el pasado 9 de junio de 2017 fue detenido en ese país en el marco de una investigación por secuestro. En ese mismo país escribió algunas columnas en una revista digital mexicana. Una de ellas sobre el desarrollo comunal indígena.
Los antecedentes en manos de Carroza, indican que Palma Salamanca tenía redes de apoyo en Francia. Una de ellas eran los familiares de Silvia Paulina Brzovic, quien fue su pareja y madre de sus hijos, lo que le habría facilitado su desplazamiento y mantención en París.