Estatal, privados y en proceso de cierre: cuatro caras de la Confech 2018
Los dirigentes de distintas universidades convocaron la primera marcha estudiantil de 2018.
Luego que el Tribunal Constitucional (TC) declarara como inconstitucional el artículo de la reforma a la educación superior que prohíbe a los controladores de instituciones de educación superior tener fines de lucro, los líderes de la Confech se declararon en alerta.
Junto a movimientos los secundarios y Colegios de Profesores, los principales voceros de la Confederación de Estudiantes de Chile acudieron a la Intendencia de Santiago para oficializar la solicitud de realizar la primera Marcha Estudiantil 2018.
La movilización se realizará el jueves 19 de abril y en Santiago el trayecto solicitado va desde el tradicional punto de partida en Plaza Italia hasta Los Héroes, la primera desde la última marcha de la Confech durante el gobierno de Michelle Bachelet del 5 de septiembre de 2017.
El Dínamo conversó con los dirigentes sobre sus diferentes demandas, proyecciones para el año y las dificultades que ven en sus propias casas de estudio.
Alfonso Mohor
Universidad: De Chile
Edad: 25 años
¿A tu juicio, cuáles son las principales demandas del movimiento estudiantil?
-La consagración de la educación como un derecho social en el marco de la provisión de la educación pública entendida como una orientada a las necesidades de la sociedad y que a su vez erradica la reproducción de sesgos socioeconómicos y de género. Lo anterior implica directamente la eliminación de las lógicas de mercado de la educación y por lo tanto el fin efectivo del lucro y el endeudamiento.
¿Cuáles son las problemáticas que defienden directamente a tu federación?
-El abandono de la educación pública es una de las situaciones que tocan más directamente a la Universidad de Chile, en ese sentido vemos cómo el autofinanciamiento y las lógicas de competencia se apoderan de la institución poniendo en entredicho su carácter de institución pública. Desde la federación posicionamos siempre con fuerza el fortalecimiento sustancial de la educación pública-estatal como una forma de avanzar a un sistema desmercantilizado.
¿Qué avances crees que se han dado en los últimos años respecto a la Educación Superior?
-Creo que el principal avance va más bien en la línea de los cambios en el sentido común. Si bien, aún nos queda mucho por hacer en relación a la reivindicación de los derechos sociales, es un concepto instalado y que cada vez encuentra más eco en la gente, así como en su momento la gratuidad en la educación comenzó a ganar terreno en el sentido común al punto en el que llegó a ser parte de los consensos más transversales en nuestra sociedad.
Por otra parte, hoy a pesar del fallo del TC, el lucro en la educación está mucho más acorralado que hace 7 años. Lo mismo pasa con la gratuidad, que con muchas deficiencias, hoy llega a un porcentaje más grande de la población. Y entre otras la derogación del DFL2 que le prohibía a las y los estudiantes de instituciones privadas organizarse es un punto también muy importante.
Si tuvieras un “cara a cara” con el ministro Gerardo Varela, ¿qué le dirías?
-Le preguntaría si se va a poner al servicio de Chile y su gente, o si seguirá velando por los intereses de los empresarios de la educación.
Francisco Morales
Universidad: Pontificia Universidad Católica de Chile
Edad: 25 años
¿A tu juicio, cuáles son las principales demandas del movimiento estudiantil?
-Desde su inicio el movimiento estudiantil ha exigido un cambio de paradigma en lo educativo, que involucre calidad, acceso universal, prohibición de lucro, regulación. Entendemos la educación como un derecho para todos y todas, sin importar el origen socio-económico, etnia, sexo, lugar de nacimiento. A su vez, el movimiento feminista ha permeado de forma transversal nuestra sociedad y nos proponemos terminar con la discriminación de género y el machismo a través de la educación. Por lo mismo, un modelo educativo no sexista se ha vuelto una prioridad para avanzar en la educación que soñamos: una que es comprendida como un derecho social, que no discrimina y que deja de violentar a nuestras compañeras.
¿Cuáles son las problemáticas que defienden directamente a tu federación?
-Como federación nos enfocamos en defender el derecho social a la educación, de forma transversal y en todas sus etapas. Por lo mismo, estamos trabajando en propuestas que abarquen desde la educación inicial, pasando por la educación escolar, por el término de la PSU y la creación de un nuevo sistema de acceso que deje de segregar y de frenar los anhelos de los estudiantes; y que tanto universidades, IP y CFT se dediquen a educar y no a lucrar con los sueños de las familias chilenas.
¿Qué avances crees que se han dado en los últimos años respecto a la Educación Superior?
– Si bien los cambios son insuficientes porque no terminan con la educación mercantilizada ni con el lucro -basta ver el reciente fallo del TC respecto al artículo 63 – no podemos negar que la gratuidad ha sido un avance. A miles de estudiantes y a sus familias se les ha entregado la posibilidad de acceder a la educación superior sin cargar con una mochila de deudas. Defenderemos esto y no vamos a permitir retrocesos. Pero también seguiremos siendo muy críticos con el modelo que aún persiste y que en muchos aspectos sigue concibiendo la educación como un negocio. En ese sentido, no dejaremos de impulsar cambios más profundos.
Si tuvieras un “cara a cara” con el ministro Gerardo Varela, ¿qué le dirías?
– Me encantaría tener un ‘cara a cara con el ministro Varela para advertirle que cuide sus palabras: empezar minimizando el rol de los estudiantes en la generación de políticas públicas no es un buen comienzo. Le pediría mayor firmeza, por ejemplo, con el fallo del Tribunal Constitucional, ya que no fue capaz de salir a condenar a las empresas controladoras con fines de lucro que tienen un evidente interés en negociar con la educación. Le pediría, aunque sin mucha esperanza, que durante su gestión envíe un proyecto que termine con la PSU, que ponga fin al Crédito con Aval del Estado y avance en gratuidad para todos los estudiantes.
Sandra Beltrami
Universidad: Arcis
– ¿A tu juicio, cuáles son las principales demandas del movimiento estudiantil?
-Las principales demandas del movimiento estudiantil siguen siendo sus demandas históricas, porque no han cambiado mucho las cosas desde 2011 a la fecha. Los avances han sido limitados y los más importantes, como el fin al lucro, ya no están. En esa línea, creemos que el Gobierno debe reponer el artículo 63 de la Ley de Educación Superior o hacer otro proyecto de ley que prohíba el lucro. Esa es una demanda fundamental histórica y que ha vuelto a resurgir con la última decisión del Tribunal Constitucional, porque nos meten directamente las manos en los bolsillos con dineros que no se revierten en Educación. La gratuidad universal también es una de las demandas importantes. Sólo 354.000 personas tienen gratuidad hoy. Son muchos los estudiantes que no tienen acceso a este beneficio.
“Asimismo, están las universidades en crisis, como lo son la Arcis o la Universidad Iberoamericana. Debe haber un rol del Estado que no ha estado ni se ha cumplido la legislación en resguardar la continuidad y el derecho a la Educación. Finalmente, está el fin del Crédito con Aval del Estado (CAE), el que también es una demanda histórica. El retiro del proyecto que terminaba con el CAE hy un nuevo proyecto tememos que sea un nuevo lucro con el crédito”, explicó Beltrami.
¿Cuáles son las problemáticas que defienden directamente a tu federación?
– Lo que es el cierre de universidades. La situación de la Arcis es una situación casi única en el país. Nosotros fuimos los conejillos de indias, todos los experimentos se hicieron con nosotros y hemos sufrido una larga agonía desde la administración provisional de 2015 a la fecha. Para nosotros, nuestras demandas tienen que ver con derechos mínimos como terminar con nuestras carreras dignamente, con una buena calidad, con nuestros compañeros en nuestra institución. Somos más de 1.600 estudiantes los que nos quedamos sin educación, lo que nos parece una gran tragedia.
¿Qué avances crees que se han dado en los últimos años respecto a la Educación Superior?
– En realidad son muy pocos los avances que se han dado. La gratuidad de la Nueva Mayoría no es lo que esperábamos porque no garantiza la educación como un derecho, pero hay que reconocer que hayan personas que estudian gratuitamente es importante, pero todavía insuficiente. El lucro era un avance importante, pero el dictamen del Tribunal Constitucional fue para nosotros un retroceso. También valoramos la desmunicipalización y la Superintendencia de Educación Superior, pero son pocos los avances en materia legislativa. Sin embargo, el movimiento estudiantil ha logrado muchas cosas: que la gente salga a la calle y que se conozca la importancia del derecho a la educación
Si tuvieras un “cara a cara” con el ministro Gerardo Varela, ¿qué le dirías?
– Tuve un ‘cara a cara’ con el ministro Varela en la Comisión de Educación y le dije que lo que queríamos era poder estudiar. Lo que le diría ahora es que los estudiantes si queremos estudiar, por eso ingresamos a la universidad. Uno puede ser dirigente, luchar por lo justo, pero nuestra finalidad es el derecho a la educación. Cuando vemos universidades con aranceles altos, una mala calidad, con malos docentes, sin investigación, sin infraestructura o con problemas y arbitrariedades, es ahí cuando vemos que este sistema de mercado no funciona. Le diría que estamos aquí por eso, no porque queremos ser dirigentes o hacernos famosos en las marchas. La educación no tiene que ser discriminatoria ni dependiente de la universidad en que uno haya podido estudiar, y eso no tiene que ver con el sistema de admisión o la PSU, sino que también con la capacidad de pago. Claramente esas diferencias no sigan existiendo. Nos gustaría que reconociera que la educación chilena es mala y que vemos que se respalda un negocio. Se puede lucrar con otras cosas, pero no con nuestra educación.
Rodrigo Rivera
Universidad: Diego Portales
Edad:
¿A tu juicio, cuáles son las principales demandas del movimiento estudiantil?
-Las principales demandas del movimiento estudiantil son el fin al lucro, la gratuidad, le educación no sexista, terminar con la deuda universitaria y las lógicas de endeudamiento, además de la inclusión en todos los niveles.
¿Cuáles son las problemáticas que defienden directamente a tu federación?
-Nuestra federación tiene por objetivo convertirse en un espacio que tenga capacidad de hacerse cargo efectivamente de los problemas e intereses de los estudiantes. Este año será muy importante ya que con las modificaciones legales tenemos como Universidad que decidir si seguimos o no en el régimen de gratuidad.
¿Qué avances crees que se han dado en los últimos años respecto a la Educación Superior?
-La gratuidad ha significado un alivio importante para muchas familias que hoy tienen mas facilidad para acceder a la educación, pero el problema es que a pesar de esto no se termina con la lógica de mercado por lo tanto aun no podemos hablar que la educación será un derecho.
Si tuvieras un “cara a cara” con el ministro Gerardo Varela, ¿qué le dirías?
-Le diría que no puede manejar el destino de la educación de la misma manera que manejaba la empresa Soprole cuando fue parte de su directorio. Si pretende hacerlo de esa manera, no tiene muchas probabilidades de éxito.