Rusia dice tener pruebas que supuesto ataque químico en Siria fue un montaje de EE.UU.
Ambos países han amenazado tomar acciones militares, reviviendo una relación similar a la que imperó en la Guerra Fría.
“Tenemos datos irrefutables de que se trata de un nuevo montaje, y que detrás está la mano de los servicios secretos de un país que en estos momentos trata de estar en la vanguardia de la campaña de rusofobia”, dijo el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov.
Con esas palabras, la autoridad se refirió a la nueva polémica que enfrente a Rusia con Estados Unidos: el supuesto ataque químico que habría realizado el régimen de Bashar Al Assad y que habría dejado un saldo de 42 civiles muertos.
Como represalia, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con atacar Siria con misiles inteligentes, en cualquier momento. La respuesta de Rusia, país aliado de Siria, fue que habrían “graves consecuencias” ante una intervención de Estados Unidos, más aún si se ven afectadas las fuerzas rusas desplegadas en el país árabe.
El ministro ruso señaló que una misión de expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) está ahora de camino a Siria. “Creo que deben llegar a Damasco mañana por la mañana y confiamos en que se dirijan sin dilación a Duma, donde nuestros especialistas, que ya estuvieron en el lugar, no hallaron ningún rastro del uso de armas químicas, sea cloro u otra cosa”, recalcó.
Ante eso, Rusia indicó que las acusaciones de Estados Unidos son un intento de justificar una intervención militar en Siria.
