Ex funcionario del gobierno de George W. Bush llama a realizar un golpe de estado en Venezuela
A través del medio Foreign Policy asegura que plantear esto "es una medida de la desesperada situación en que se encuentra Venezuela".
No es desconocida la opinión de Estados Unidos sobre lo que ocurre en Venezuela. Un ejemplo de ello es que el gobierno de Donald Trump calificó de “falsas” las elecciones que ratificaron a Nicolás Maduro en el poder hasta el 2025.
Esto se suma a lo ocurrido hace solo unos días en la 48ª Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), donde con 19 votos a favor, 11 abstenciones y cuatro en contra, el organismo resolvió aprobar la resolución contra el gobierno de Nicolás Maduro que abre la puerta a la suspensión de Venezuela.
Bajo este contexto es que José R. Cárdenas, quien ofició como administrador asistente en funciones para América Latina en la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional en la administración de George W. Bush, publicó un artículo en el medio Foreign Policy el que tituló “Es hora de un golpe en Venezuela”.
En él, plantea que “el diálogo o la diplomacia no pueden traer una resolución” e insiste en que un golpe militar es una opción mucho más atractiva. Cárdenas sostiene que depende de los Estados Unidos convencer a los militares venezolanos de que “tienen la responsabilidad única de rescatar a su país del abismo” y que deben levantarse y sacar a Maduro por la fuerza. Los militares, agrega, son los que están en mejor posición para “restaurar una democracia constitucional legítima”.
“Por supuesto, nadie quiere ver una regresión a la Edad Oscura latinoamericana, en la que los golpes militares son la norma, a expensas del gobierno civil y la democracia. Pero es importante notar e identificar al ejército venezolano como el único agente de cambio lógico no es abogar por un golpe. El hecho es que ya ha tenido lugar un golpe de estado perpetrado por Maduro y sus asesores cubanos contra la constitución del país. Solo los nacionalistas en el ejército pueden restablecer una democracia constitucional legítima”, manifestó.
Aún así, expresa que esperar que una facción de los militares deponga el régimen actual y restaure la democracia implica riesgo, “es una medida de la desesperada situación en que se encuentra Venezuela”.
Por otro lado, sostiene que “difundir agresivamente la traición del régimen actual al pueblo venezolano, combinada con la amenaza de sanciones en continua expansión contra los funcionarios del gobierno que prestan sus esfuerzos a la represión, es probablemente la mejor apuesta para catalizar desarrollos positivos dentro de Venezuela“.
“La peor opción es permitir la consolidación de otro régimen represivo y autoritario en el hemisferio, que verdaderamente anunciaría el regreso a la Edad Oscura en las Américas. Que todos los principales gobiernos de la región lo hayan reconocido -si bien ocasionalmente, es un desarrollo importante-. Pero es hora de llevarlo al siguiente nivel. El aislamiento diplomático y económico es una herramienta poderosa, especialmente en las Américas, donde los países son reacios a parecer desfasados. También es una herramienta poderosa para concentrar las mentes de los patriotas venezolanos, que están en una posición única para hacer algo para rectificar la situación”, concluyó.