Inclusión laboral de personas con discapacidad: “Las ganas lo pueden todo”
Natalia Díaz, quien recibió la distinción “Espíritu de Superación” en 2017 de parte de la ACHS, recuerda su exitoso proceso de reinserción en el marco de una nueva versión del Premio Inclusión 2018.
Con la nueva Ley 21.015, más conocida como Ley de Inclusión Laboral, que entró en vigencia en abril de este año, se busca promover que las personas en situación de discapacidad enfrenten el mundo del trabajo en igualdad de condiciones. Y por lo mismo, se han establecido una serie de medidas para las entidades, sean públicas o privadas, que cuenten con 100 o más colaboradores.
Dentro de éstas, se destaca la obligación de contratar o mantener al menos un 1% de trabajadores con discapacidad, o bien, que sean asignatarios de una pensión de invalidez bajo cualquier régimen previsional.
En este escenario, la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), aunque no tiene competencia directa en la implementación de la Ley 21.015, a partir del año pasado ha estado dictando seminarios a sus entidades afiliadas, con el fin de entregarles asesoría técnica en términos de alcances, objetivos e impacto de esta temática. Además, lanzó la 30° versión del Premio Inclusión ACHS 2018, siendo ésta la primera convocatoria que tiene lugar bajo el amparo de dicha ley.
Y en estas tres décadas de historia muchas empresas y colaboradores han sido destacados con este premio, siendo una de ellos Natalia Díaz, quien en 2017 fue la ganadora en la categoría “Espíritu de Superación”.
Sin límites
Un accidente vehicular en 2013 cambió la vida de Natalia con tan sólo 25 años. Esto, tras pasar 7 meses internada en el Hospital del Trabajador- ACHS, en el que tuvieron que amputarle ambas piernas y solucionar un grave daño pulmonar.
Pero pese a ese giro radical, esta joven siempre mantuvo la alegría y las ganas de volver al mundo laboral. “Cuando yo me accidenté ya estaba trabajando en el laboratorio, llevaba alrededor de 3 meses. Y de ahí estuve como 2 años 7 meses fuera por el accidente y mi rehabilitación. Cuando les comenté que volvería a trabajar me contacté con el área de Recursos Humanos y ellos siempre tuvieron muy buena disposición”, relata Natalia.
Es que, tal como lo refleja el premio “Espíritu de Superación”, Natalia recalca que “siempre les dije que yo iba a volver a trabajar, siempre tenía ganas de hacer cosas. Yo siempre quise seguir con mi vida, independiente de lo que me había pasado. Después les dije que me iba a ir a vivir sola, y luego cuando se enteraron de que iba a ser mamá estaban todos sorprendidos”.
Y fueron esos deseos por salir adelante, sumados a la buena acogida que recibió por parte de la empresa, los que tienen hoy a Natalia desarrollándose profesionalmente en plenitud. “Antes de volver me recalcaron que tenía un baño habilitado, que había un estacionamiento para mí cerca del ascensor. En muchas ocasiones no podía ir a trabajar por malestares físicos y ellos no tenían ningún problema en que yo trabajara de forma remota, y en ese sentido ellos hicieron una excelente inclusión. Siempre estuvieron súper interesados en que yo volviera a trabajar”, destaca esta joven contadora auditora.
Por eso, en una nueva edición del Premio Inclusión ACHS y al que se postular hasta el 31 de agosto en www.achs.cl, Natalia invita a que las instituciones “independiente de la condición física de cada persona, se fijen en su capacidad intelectual, lo otro pasa a un segundo plano. En ese sentido, no creo que no debiesen haber ‘peros’ para tener gente con discapacidad e incluir a las personas”.
Y en cuanto a los trabajadores en situación de discapacidad, el mensaje es que “no se sientan disminuidos por una discapacidad, porque las ganas lo pueden todo, o sea, para mí querer es poder, tienes que luchar por lo que quieres, no se pueden dar por vencidos. Muchas veces uno es mirado o cuestionado por las discapacidades físicas, pero cuando uno demuestra su capacidad intelectual quedan todos realmente sorprendidos”, agrega Natalia.