Secciones El Dínamo

cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad
12 de Septiembre de 2018

El mensaje de Álvaro Corbalán a 45 años del golpe: “Se me olvidó todo y lo que no… también”

El ex CNI reivindicó desde Punte Peuco el actuar de las FF.AA. y aseguró que se olvida que “Pinochet evitó una guerra civil y dos guerras con nuestros vecinos".

Por Redacción EL DÍNAMO
Compartir

Desde el penal Punta Peuco, Álvaro Corbalán quiso celebrar como un triunfo para la patria el golpe militar del 11 de septiembre de 1973, que ayer cumplió 45 años, enviando un “saludo”.

En el escrito reivindicó el actuar de las FF.AA. que, en su opinión, “sacaron adelante un país que se recibió en la ruina moral, económica, política y social más grande de los que se tenga memoria”, según publicó La Tercera.

Aunque reconoció que este día “divide” al país, para él fue “una victoria” y como ya “no se tiene nada más que perder”, comenta que le es fácil compartir su versión.

Corbalán sostiene que tras el paso de los años ya no son “un peligro para nadie”, han debido enfrentar juicios que “eternizan la venganza y el revanchismo, con la ficción de presuntos 38 mil torturados que sólo buscan prebendas económicas y sustentan sus denuncian en falsedades”.

La izquierda es lapidaria y mentirosa, y la derecha, insolidaria, cobarde y temerosa, es decir, tuertos con el ojo izquierdo y tuertos con el ojo derecho. La DC ha perdido el equilibrio de su tolerancia de centro”, sostuvo.

Según manifestó, se está “ejecutando una venganza anacrónica e injusta” y se olvida que “Pinochet evitó una guerra civil y dos guerras con nuestros vecinos y que gracias a la DINA y CNI se frustraron numerosos atentados de terrorismo”.

Corbalán aseguró que  “la felicidad y las desgracias resucitan”, por lo que la historia podría repetirse. Es que según indicó, “la situación actual del país es preocupante y tiene similitudes temerarias a lo vivido antes del 1973”. Ante esto, la última alternativa que tiene Sebastián Piñera, según el ex CNI, es gobernar a través de decretos.

Antes de finalizar quiso expresar su “sentir personal” ante una “soledad atareada” al interior de Punta Peuco, donde ocupa la mayoría del tiempo en tocar su teclado y guitarra, y en leer.

Aunque extendió su disponibilidad para acudir a tribunales, no lo haría para declarar, porque llegó “a un hastío absoluto con la justicia, se me olvidó todo y lo que no… también. Fue lo mismo asumir o dejar establecido las cosas en que no tuve injerencia porque igualmente estaba elegido para ser culpable”.

“Mientras el sol gobierna los campos y la luna rige los mares, sigo perseguido, pero jamás abatido. La salud me falta la edad, el bien ausente se siente, el olvido aniquila y hasta mi ángel de la guarda a veces me cuesta ubicarlo. Dios ha estado muy fugitivo, pero gracias a él sigo aceptando lo inexplicable”, escribió.

Léenos en Google News

Notas relacionadas

Deja tu comentario

Lo más reciente

Más noticias de País