Exhiben micros históricas para celebrar el inicio de la electromovilidad
La actividad realizada en la Plaza de la Ciudadanía mostró cuatro tipos de micros distintas que se han usado como locomoción colectiva en la capital.
El Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones realizó esta mañana una exhibición de los buses que han sido parte del transporte público de Santiago durante los últimos 40 años, con el motivo de celebrar la implementación de los nuevos buses eléctricos que se incorporaron al sistema.
La actividad realizada en la Plaza de la Ciudadanía contó con la participación de la ministra de la cartera, Gloria Hutt, y mostró cuatro tipos de micros distintas que se han usado como locomoción colectiva en la capital.
“Desde fines de los años 70’s hasta 2005, el transporte público de la Región Metropolitana era el responsable en gran medida de los altos niveles de contaminación que tenía esta ciudad. Esto se sumó a problemas de seguridad característicos de un sistema anticuado y poco regulado”, señaló la ministra Hutt.
Además, la autoridad agregó que “hoy eso es parte del pasado, gracias al trabajo que se ha desarrollado con la incorporación de nuevas tecnologías más amigables con el medio ambiente, como los primeros 100 buses eléctricos, que no generan emisiones y por lo tanto son un gran aporte para mejorar la calidad del aire que respiramos”.
Por su parte, el subsecretario de Transportes, José Luis Domínguez, indicó que “desde los 13 mil buses contaminantes de los 80’s, que generaban problemas ambientales y de congestión graves, pasamos a un sistema ordenado que dejó de generar un problema ambiental y hoy contribuye a reducir la congestión”.
“Esos atributos buscan profundizarse aún más con los 200 buses eléctricos y los 490 Euro VI que estamos incorporando. Y lo reforzaremos aún más con la renovación de flota que traerá la nueva licitación”, añadió Domínguez.
La exposición, además, buscó repasar la historia del sistema de transportes público capitalino, el cual entre los 70’s y 80’s contó con 13 mil buses, de los cuales el 70% incluía a la Alameda en su recorrido, provocando un caos vial en la principal avenida de Santiago.
Luego, en 1992 se implementaron las populares micros amarillas que operaron hasta 2007, cuando se puso en marcha el Transantiago donde se buscó optimizar el servicio con mejores buses y un sistema de pago diferente.
El último cambio lo presentan los nuevos buses eléctricos que ya circulan por la ciudad, los cuales cuentan con una serie de medidas que les permiten tener mayor accesibilidad a las personas.
