Cuando Fernández estuvo alejado del kirchnerismo: “Toda la acción institucional del gobierno de Cristina es deplorable”

El kirchnerismo, liderado por el abogado peronista Alberto Fernández, arrasó con las expectativas de Mauricio Macri de lograr un resultado positivo en las primarias con miras a las elecciones generales de octubre en Argentina.

Fernández encabeza la coalición opositora “Frente de Todos” y lleva como candidata a vice presidenta a Cristina Fernández de Kirchner. 

Sin embargo, la buena relación que hoy tienen, dista bastante de lo que fue hace unos años cuando el actual líder de la oposición criticaba sin rodeos el gobierno de Cristina Fernández.

Fernández fue jefe de gabinete durante todo el gobierno de Néstor Kirchner (2003-2007) y parte del de Cristina de Kirchner (2007- julio de 2008). Sin embargo, se transformó en un ex funcionario crítico del kirchnerismo y sus reformas, calificando como “deplorable” el tercer mandato.

“Uno ya no encuentra elementos para ponderar. Donde la economía se destruye, la pobreza aumenta y se niega su existencia”, indicó en ese momento el líder del “Frente de Todos”.

Corría el año 2008 y Alberto Fernández renunciaba al kirchnerismo y se distanciaba de Cristina.

“Toda su acción institucional es deplorable, todo lo que hizo en materia judicial es deplorable. El tratado de Irán es deplorable, la muerte de (juez Alberto) Nisman es deplorable, la no resolución de la muerte de Nisman es más deplorable. A mí me cuesta muchísimo encontrar un elemento valioso“, sentenciaba en ese momento Alberto Fernández.

Asimismo agregó: “Creo que Cristina tiene una enorme distorsión sobre la realidad, francamente lo digo. Debería rectificarse un montón de cosas. Llegó a decir que Alemania estaba peor que nosotros en materia de pobreza y que la inflación no es importante. Eso es negación terca, por momentos absurda“.

“Ni Cristina es Perón ni yo soy Cámpora”

Pero como nada en política es para siempre, tuvieron que pasar casi nueve años para que Cristina y Alberto se reconciliaran.

“Nos reencontramos en diciembre de 2017. Ese tiempo hizo que recuperáramos la amistad que habíamos tenido, lo que nos permite trabajar con mucha confianzael uno con el otro. Fue muy cruel lo que nos pasó. Yo no la pasé bien estos años. Todos hicieron la lectura del reencuentro político y nadie hizo la lectura del reencuentro humano. Eso es lo que más valoro”, expresó Alberto Fernández.

“Ni Cristina es Perón ni yo soy Cámpora y ella lo sabe porque un día renuncié y estuve diez años confrontando políticamente. Lo que a muchos les cuesta entender es que dos personas que se aprecian y se respetan puedan encontrar un punto de acuerdo para trabajar juntos como trabajamos años antes”, sentenció.